1. Mundogamers
  2. Articulos
  3. PC

10 juegos indie del 2011

Jueves 15 de Diciembre de 2011 por Raúl F. Rosso
Y ahora me ponen en la tesitura de seleccionar los mejores juegos indie del 2011. La cosa tiene mucho truco. ¿Cuál es el baremo para poder ponerle ese sobrenombre a un videojuego? ¿La solera del estudio que lo realiza? ¿Una acusada escasez de recursos? Es muy complicado llegar a un acuerdo con eso. Si a ello le sumamos la necesidad de elegir tan solo diez representantes, posiblemente nos salgan muchos enemigos tras esta selección. Eso sí, que nos quiten lo bailao, aquí van diez juegazos de esos de santiguarse al ver la pantalla de presentación, así como diez golpes de mesa a una industria que todavía cree que la calidad de un producto es directamente proporcional a la cantidad de medios y tecnología utilizada en sus desarrollos. Pues se van a enterar.

Terraria


10


De Minecraft hemos visto este año un aluvión de clones, variantes y vueltas de tuerca, pero muy poquitos han sido capaces de alzar el vuelo distinguiéndose lo suficiente de la propuesta original. Uno de los pocos que ha sabido encontrar su camino ha sido Terraria. Lo que en un principio pudiera parecer una interpretación en 2D del juego de Mojang va mucho más allá al introducir un componente arcade que diversifica hasta el extremo la experiencia. La exploración y crafteo de materiales se alterna con combates contra enemigos de todo tipo con armamento más propio de un frenético shooter. Una chulada.

The Binding of Isaac


10


Tras este nombre bíblico se esconde la última locura de Edmund McMillen, uno de los padres de Super Meat Boy, y con este credencial ya es más que suficiente. Una maravilla de juego que por compararlo con algo podría decir que está estructurado y se controla como si jugásemos en las mazmorras de los viejos Zelda en 2D pero manejando a un bebé en sus febriles sueños intrauterinos plagados de fluidos corporales y criaturas deformes que evocan sus más temidos miedos. Con una carta de presentación así, pica cualquiera.

Gemini Rue


10


Muchos juegos indie está asociados a una estética old school, ya no por la añoranza de tiempos pasados, sino por la facilidad que supone el utilizar recursos técnicos de otra época, haciendo el desarrollo más asequible para un estudio pequeño. Aun así, los recursos gráficos usados no está ni mucho menos disputados con la calidad del producto, y Gemini Rue así lo demuestra. Una aventura gráfica que bebe de la época dorada del género hace ya un par de décadas. Cine negro ciberpunk bajo un interfaz similar al de los viejos juegos de Sierra. Solo para gourmets.

Magicka


10


Uno de los mayores logros de un diseñador de videojuegos es hacer que una propuesta simple en apariencia y asequible desde el principio pueda desembocar en una mecánica profunda y tan enrevesada como nuestra pericia nos permita. Y eso lo consigue Magicka. En entornos con perspectiva isométrica controlamos a un mago que es capaz de lanzar 8 hechizos diferentes. Combinándolos entre sí y haciendo uso del entorno, podemos producir docenas de efectos distintos. Si a eso le añadimos la posibilidad de vivir la experiencia interactuando con online otros jugadores para derrotar en grupo a los enemigos, tenemos una locura de juego.

Superbrothers: Sword and Sworcery


10


En desarrollos de esta índole sin el peso de grandes estudios encima, uno puede plantearse ir más allá de lo común y montarse el chiringuito como una experiencia audiovisual más allá de los cánones establecidos en esta industria. En estos casos es más complicado tener un punto de vista veraz, ya que hablamos de un videojuego al servicio de los sentimientos que es capaz de evocar. Una idea antinatura que en el caso de Superbrothers se puede pasar por alto nada más que por los valores estéticos y morales que posee. A simple vista es una aventurilla point and click con preciosos gráficos pixelados. Una vez puestos en materia, lo que nos tragamos es una profunda historia de varios niveles narrativos que es capaz de abstraer nuestra mente y hacernos vivir en un mundo tan irreal como embriagador. Y todo eso en su iPad iPhone, señora.


<< Anterior Siguiente >>