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[E3 2010] Día 1 ? Conclusiones

Martes 15 de Junio de 2010 por Redacción
El E3 se ha puesto en marcha siendo Microsoft la primera en tomar la iniciativa para presentar su futuro. Las primeras 24 horas en Los Angeles nos han dado para tres conferencias: Microsoft, Electronic Arts y Ubisoft, cuyos más importantes anuncios os hemos ido retransmitiendo a modo de noticias. Aquí tenéis todos los datos, y a continuación, nuestra valoración.

Alejandro Pascual Montero

Sinceramente, me da bastante pena que lo que más me haya llamado la atención de esta conferencia sea Metal Gear Solid Rising. Y no porque sea un mal juego, para nada, sino porque es un spin-off de una secuela de una secuela de un juego de hace más de diez años. Y lo digo con todo mi cariño a una de mis sagas favoritas. Pero cuando llevas tanto tiempo monitoreando E3 y ECTS y demás eventos uno sólo abre los ojos con las cosas nuevas. Y lo único nuevo que había era una especie de película de Crytek.

Uniendo aquí las conferencias de Ubisoft y EA para hacer balance del día uno, lo cierto es que he visto mucho tiro y pocas nueces, algo de dar patadas a balones y un poco de rueda quemada. Tanto ha sido así que una secuela de Assassin?s Creed II se me antoja todo un lujo cuando veo un Medal of Warfare sin absolutamente ninguna pretensión de cambiar nada de la competencia. Tontín y pizpireta. ¿Es esto el futuro de los videojuegos, donde todo el mundo debería entrar? Cada vez esta industria, en vez de expandirse correctamente, me recuerda más al noveno arte, el comic, un sector difícil de entrar si no es de joven (puedes perderte) y difícil de salir si ya has entrado.

Kinect no es la respuesta, es una prolongación de la falta de ideas. No sirve de nada lanzar un producto nuevo (no copia a Wii en su tecnología) si haces los mismos juegos viejos y lanzas un Kinect Sports/Kinectzimals y demás cosas impronunciables.

No es la respuesta. No es mi respuesta. La industria debería demandar nombres nuevos, no cada año, sino cada mes. Debería estar cansado, al menos un tanto por ciento, de recorrer el mismo camino una y otra vez, con jefe final de vez en cuando. ¿Dónde estará la respuesta?

Enrique Luque de Gregorio

En mi opinión, este E3 ha empezado de manera un tanto decepcionante, lo cual no es ninguna sorpresa. La feria de videojuegos más importante del mundo se ha transformado en una carrera trepidante hacia ninguna parte. Mientras aún no hemos visto en las tiendas algunos de los juegos anunciados el año pasado, las tres grandes compañías fabricantes de consolas se empeñan en mostrarnos todo su poderío con exclusivas que cada vez son más una ilusión que otra cosa. Todo ello entre presuntas filtraciones, vídeos de juegos ya conocidos y nuevos tráilers de treinta segundos de duración.

Especialmente insípido me ha parecido el paso de Microsoft por la feria de este año. Nuevos detalles de títulos ya anunciados (buenos títulos, eso sí), un rediseño de consola que ya era una obligación casi moral y más de una hora dedica a Kinect, una tecnología muy prometedora pero que, por lo visto hasta ahora, ha tirado por el camino más fácil: imitar lo que Wii y Nintendo ya han hecho (y no entro en ese tema porque ya está muy visto). Esperemos que este martes sí dé un poco más de sí.

Mario Fernández

Microsoft empezó bien desvelando su nuevo acuerdo con Activision y mostrando el cada día más esperado Call of Duty: Black Ops. Consiguió alcanzar las estrellas cuando enseñó Metal Gear Solid Rising y después supo mantener el interés con Gears of War 3. Pero cuando parecía que nada podía impedir que su conferencia fuese la más comentada de este E3, le dedica más de media hora a Kinect (que ya no era ninguna sorpresa, ni siquiera su nombre) y aburre a todos los presentes con programas de ejercicios y baile.

Al final confirmó la nueva Xbox 360 Slim, más pequeña pero también más fea, y le regaló una a todos los periodistas presentes... que en realidad eran muchos más de los que había en la sala ¿Se trataba de una estrategia para conseguir aplausos y gritos? Quién sabe. A Microsoft le faltaron juegos exclusivos y originales y le sobraron minutos para explicar Kinect y ESPN.

Victor Junquera

Vemos cada vez más claro cómo Microsoft está eligiendo la expansión comercial por encima del reconocimiento de los compradores potenciales. Un año más, enfoca la conferencia a hacer de Xbox 360 un producto familiar, a hacer de ella un elemento tan habitual en un hogar como es una televisión, pero se olvida de que su propia competencia usa Windows.

Deberíamos haberlo esperado, una conferencia 100% americana para americanos, con un producto por bandera difícil de entender, con un juego de palabras por nombre tan americano como poco pegadizo, pero ahí ya no me aventuro a criticar, que todos creímos que Wii sonaba mucho peor que Revolution y ahí está. Lo importante, los juegos, han sido casi más decepcionantes que la puesta en escena. Viles clones de lo que ya pudimos ver hace años de quien innovó con el control por movimiento, teniendo que ser una third party quien ponga los puntos sobre las íes con el sucesor espiritual (y multiplataforma) de REZ.

Y es que, del día previo a la apertura del E3 me quedan cuatro sensaciones:
-Intriga, por la exclusiva de Crytek para 360, Codename Kingdoms.
-Ansia, por jugar, con mando, con las manos o con el alma, a Child of Eden.
-Curiosidad, por ver si Project Dust es uno de esos juegos que acaba en el limbo de la cancelación o sale adelante.
-Decepción, porque Kinect, por ahora, no es ni la mitad de todo lo que nos habían prometido.
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