Avance Let's Tap WII

Resulta curioso, pero uno de los elementos más importante en Let?s Tap es la caja donde viene, ya que bastará con que pongamos el Wiimando acostado boca arriba sobre la misma y así empezar a disfrutar de los curiosos minijuegos que nos ofrece la más reciente creación del maestro Yuji Naka.

El padre de Sonic nos invita a deleitarnos con una propuesta jugable que se sale de lo convencional (algo en lo que la consola de Nintendo es experta), bastará con que toquemos la caja y la percusión del golpe sobre el Wiimando se encargará del resto; un concepto sencillo pero absolutamente fascinante.

Golpea para que se caiga?

Let?s Tap es el nombre de esta maravilla que Nintendo puso a disposición de los usuarios nipones desde el año anterior, pero que por razones no muy claras todavía, no logró encumbrarse en las ventas y ha pasado prácticamente desapercibido en las tierras del sol naciente, una verdadera lástima.

Por fortuna todo indica que Sega no se dejó afectar por las deficientes ventas del juego y espera que tenga mejor suerte en su periplo por América y Europa; territorios que siempre han acogido con creces propuestas innovadoras de este tipo.

Let´s Tap ofrece un concepto innovador aunque de entrada muy sencillo e intuitivo (quizás demasiado incluso); basta con proponer un ritmo adecuado a la hora de golpear la caja y disfrutar con sus diferentes minijuegos.

No obstante, contrario a lo que pueda parecer Let?s Tap no es un juego musical, se encuadra mucho más en el género de los puzles y así lo dejan entrever las diferentes pruebas a las que se ve sometido el jugador; más que el ritmo, lo que se propone es conocer la lógica con la que podremos resolver los diferentes esquemas planteados.

?A que no me alcanzas?

Gracias a lo anterior Let?s Tap ofrece conceptos que van desde sencillas plataformas bidimensionales, hasta competencias de carreras, pasando por curiosas pruebas donde debemos hacer explotar unas estructuras o causar pequeñas ondas en un riachuelo.

Son juegos para todos, las competencias ciertamente recuerdan al incesante ?machaca? botones de los antiguos juegos de Konami inspirados en los juegos olímpicos (solo que aquí es mucho más sencillo); de otra parte propuestas como las de mantener una estructura dando leves golpecitos para que no caiga sino lo necesario suena adictivo como pocos.

Gráficamente el juego no pretende exigir en demasía a la consola, como buen juego de retos, el aspecto visual pasa por ofrecer los elementos necesarios para asumir el desafío sin que estos lleguen a ser unos peligrosos distractores (no obstante escenarios como el del riachuelo son dignos de elogio).

Visualmente es sencillo, pero tiene muy buenos momentos como en este riachuelo.

Hay una buena cantidad de pruebas con las que se garantiza variedad a lo largo de su desarrollo, no obstante la mecánica en la mayoría es demasiado sencilla; de modo que la principal competencia en let´s Tap va de la mano del modo multijugador donde desafiar a los colegas puede ofrecer horas de autentica y delirante diversión.

El apartado sonoro es cumplidor, en virtud a una buena cantidad de temas que componen los minijuegos (en especial los de ritmos propiamente dichos); Let?s Tap es un juego encantador, si bien su aspecto es bastante modesto.

No obstante tampoco podemos venirnos a engaños, la mala recepción de este juego por parte de los usuarios nipones no deja de ser un mal presagio; es cierto que en cuestión de gustos se dan claras diferencias entre occidente y oriente; pero no siempre es así (ojala y esto sea lo que acontezca con el juego).

Colorido como pocos?

Let´s Tap definitvamente no convenció en Japón, sus desarrolladores esperan que se trate de esos juegos ?atemporales? que no venden demasiado en sus inicios pero que siempre mantienen un interesante porcentaje en ventas a lo largo de su existencia.

Por lo innovador de su concepto, por lo atractivo de su jugabilidad y por el hecho de ser tan adictivamente sencillo; let?s Tap es una propuesta digna de verse; menos mal que Sega parece mantenerse firme en mantener su lanzamiento en primavera; y solo en ese momento podremos saber de primera mano (literalmente hablando) si merece la pena apostar a por él.
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