Cada día más, los juegos de desarrollo abierto, comúnmente llamados sandbox, empiezan a cansarme. Más que nada porque la supuesta libertad que ofrecen, o que deberían de ofrecer, la mayoría de las veces no se encuentra por ninguna parte.
Es posible que puedas elegir qué ropa llevar o en qué orden realizar las misiones, pero la mecánica acción-consecuencia aún debe explotarse mucho en el mundo de los videojuegos. Esa es una de las principales razones por las que me sorprende que me guste la serie inFamous, tanto su primera entrega (que ya alabó en su momento nuestro compañero Víctor), como esta secuela.
Pero no es casualidad. Después de haber jugado infinidad de títulos calzando las mallas de todo tipo de superhéroes, pocas veces me he sentido realmente como en la piel de uno (que nadie se atreva a mencionar DC Universe Online, por favor). Y ahí es precisamente donde triunfa de nuevo inFamous 2.
Como voraz lector de cómics lo puedo asegurar: Sucker Punch ha sabido entender perfectamente el lenguaje de Marvel, de DC, de Spider-Man, de Heroes, y plasmarlo en un videojuego con acierto. Al fin. Cuando en inFamous 2 vas saltando de un edificio a otro realizando tal o cual misión, te sientes un superhéroe (o un supervillano). Algo que no ha conseguido, por ejemplo, Activision con sus mil entregas de Spider-Man.
En Sucker Punch ya acertaron con al fórmula, insistimos, durante el primer inFamous, y aquí no hacen más que repetirla, cuidarla y mejorarla un poco. Básicamente la jugabilidad es la misma, y hasta la historia resulta totalmente continuista. Si no jugaste la primera parte no pasa nada, tampoco es El Padrino 2 (hablo de la película, no del juego), pero es recomendable ir paso a paso.
Lo que sí cambia es el escenario: New Marais toma el relevo a Empire City. Y en esta ocasión los desarrolladores han tenido tiempo de crear una ciudad más grande y detallada. La posibilidad de elegir entre el bien y el mal, gracias a un efectivo sistema de karma, vuelve a ser parte de la gracia de inFamous 2.
Como en los cómics, la lucha entre el bien y el mal no acepta matices, es blanco o negro, o Batman o Joker. Durante el juego el tipo de acciones que realizas y de misiones que llevas a cabo varía en función al tipo de personaje que quieras ser. Y como consecuencia de que seas un buen tipo o uno malo, tanto la actitud de los ciudadanos como el propio final del juego cambian.
InFamous 2 tarda menos en arrancar que el original, ya que
Sucker Punch ha tenido la delicadeza de mantener lo poderes que ya teníamos en la primera parte. Es decir, que no sucede como en todos los Castlevanias de rigor, que tienes que encontrar el doble salto por enésima vez en la saga. Desde el principio las luchas son, por lo tanto, emocionantes e intensas. Estamos ante una secuela con todas las letras. No obstante, el
ir ganando experiencia, superando misiones y consiguiendo nuevos poderes continúa siendo la razón de ser de juego. Todo enfocado desde el punto de vista de la acción, de una acción tan directa y rápida como la del mundo del cómic. En este sentido, lo que sí se ha mejorado han sido las peleas cuerpo a cuerpo, gracias a las posibilidades de un nuevo aparato especialmente creado par eso. Todo lo demás sigue siendo lo mismo, con el protagonismo de los poderes eléctricos con los que lanzar ataques o recuperar la vida. También puedes cubrirte, con el algunos shooters en tercera persona, pero el ritmo trepidante del juego hace que generalmente sea tan innecesario como inoportuno.
A nivel de producción, inFamous 2 supera ampliamente a la primera parte (algo lógico, por otro lado). Más que el tiempo pasado entre una entrega y otra, está claro que los chicos de Sucker Punch han sabido aprovechar la ?agoradora experiencia? (según sus propias palabras) que fue el juego original. En esta ocasión nos encontramos con una ciudad más inspirada y mejores animaciones para los personajes. Todo moviéndose de manera más que fluida. La banda sonora y el doblaje en castellano son tan profesionales como acostumbran habitualmente los productos de Sony.
Por último, conviene destacar el editor de niveles que también se ha incluido en el lanzamiento. ¿Editor de niveles? Bueno, no exactamente, más bien
se trata de una herramienta con la que desarrollar tus propias misiones, eligiendo entre un amplio numero de opciones, eso sí, pero todo relativamente limitado. Esto no es LittleBigPlanet 2, por supuesto. Si te lo tomas con paciencia, en cualquier caso, se trata de una opción interesante, sobre todo a la hora de compartir tus creaciones con las de otros usuarios. Con el tiempo suponemos que ganará fuerza.
En resumen, inFamous 2 mantiene perfectamente el espíritu desenfadado de la primera parte, su ritmo, y lo pule un poco en cuestiones tanto jugables como visuales. No es revolucionario, ya que su esencia es la misma, pero sí puede considerarse una buena evolución. Y lo más importante de todo:
esta saga continúa siendo lo más parecido que a día de hoy puedes encontrar a un cómic en el mundo de los videojuegos. NOTA FINAL: 8.5
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