Hemos ido viendo durante varios años la tendencia de que, cada año, Call of Duty sea el videojuego más vendido de la historia en el X tiempo inicial, y cada año, se superan los propios récords de la saga dando cada vez un producto más vendido.
Todo un mérito viendo una economía en declive y viendo que cada vez se compran menos videojuegos, que Activision siempre sea capaz de producir semejantes cifras millonarias con sus Call of Duty.
Pero este año, a este paso, uno de los récords no se batirá a pesar de que en el primer fin de semana, en la primera semana y en el primer mes, Modern Warfare 3 ha batido todos los récords posibles.
Según informan los analistas de Macquarie Equities para Gamasutra, la franquicia ha experimentado una caída de más o menos un 4,2% en Modern Warfare 3 con respecto a Black Ops, y en esta situación, parece que la última entrega no alcanzará nunca a la anterior.
¿Significa esto que la gente está empezando a cansarse del shooter anual o es sólo el mínimo efecto de la crisis económica? ¿Quizás culpa de la segunda mano? ¿La competencia de Battlefield 3?
No exageremos, viendo la cantidad de millones que atesora Activision al año gracias a esta saga, difícilmente podríamos llamarlo una caída, pero es una caída al fin y al cabo.
La entrega de este año, que todo apunta a que será Call of Duty: Black Ops 2, podría ser la decisiva para que, según la reacción del público tras ocho entregas anuales de CoD, Activision pueda plantearse un cambio en una estrategia que parece empezar a no hacer gracia a muchos jugadores.