Todos los seguidores de FIFA nos alegramos al conocer la decisión de Electronic Arts de poner el juego oficial de la Eurocopa 2012 a modo de expansión descargable para FIFA 12 a 20 euros.
Algunos ya advertimos que esos 40 euros de ahorro con respecto a otros juegos de citas internacionales, seguro, significarían algo negativo para el desarrollo final de la obra. Por desgracia, no nos hemos equivocado: en la comparación con lo que vimos en el software de Sudáfrica 2010 acaba perdiendo de mucho, y la evolución que vimos con respecto a FIFA 09 queda a años luz de lo que ha quedado entre FIFA 12 y Euro 2012, y eso, claro, es un problema. ¿Era un buen producto aquél juego de Sudáfrica? Sí, pero era caro para lo que ofrecía, máxime cuando teníamos el magnífico simulador futbolístico de ese año a 30 euros. ¿Es un buen producto Euro 2012? Por el precio sí, pero quizás podrían haberse mojado un poco más en pos del jugador que tanto paga y a veces tan poco recibe. ¿Esperábamos duros a cuatro pesetas?
La pregunta obligada es la siguiente:
¿Qué hemos perdido en esos 40 euros de ahorro? Una evolución de FIFA 12 que nos dé las primeras pistas de cara al futuro FIFA 13, los comentarios de Javier Lalaguna y Pepe Domingo Castaño, el ambiente festivo de una competición internacional que no podíamos encontrar en FIFA y licencias oficiales de muchas selecciones no clasificadas. Aunque EA ya ha explicado el asunto de las licencias, nos cuesta entender cómo es posible que falten más de 20 selecciones sin nombres reales en el juego oficial de la Eurocopa y que una de ellas, encima, sea Ucrania, participante, cabeza de serie y organizadora de la ronda final del campeonato.
La lista de selecciones sin nombres es larga: Albania, Andorra, Armenia, Azerbaiyán, Bielorrusia, Bosnia - Herzegovina, Eslovaquia, Estonia, Gales, Georgia, Islandia, Islas Feroe, Kazajstan, Letonia, Liechtenstein, Lituania, Luxemburgo, Macedonia, Malta, Moldavia, Montenegro (¡Ouch!), San Marino, Serbia (¡MEGA-OUCH!) y Ucrania. La solución de EA ha sido la que antaño arrancaba sonrisas en PSX o Super Nintendo, la picardía made in Konami (y de muchas otras antes) de cambiar ligeramente los nombres para que se asemejen a los reales, quedándonos con cosas como Dzokix (Dzeko), Ekk (?Lavadora? Hleb), Belth (Gareth Bale) o Rumsay (Ramsey).
¿Es un error menor? Depende para quién, pero creo que sí, aunque pensaba que ese asunto había pasado a mejor vida cuando se trataba de software firmado por la casa canadiense. Una lástima tener que lidiar con ello en pleno 2012.
Sobre las evoluciones que comentábamos arriba, tengamos algo claro: el juego no deja de ser FIFA 12 en ningún momento. Accedemos a él desde el propio título y todo está prácticamente igual que en la magnífica obra de EA Sports, más allá de las nuevas indumentarias o los estadios oficiales de la cita. El ambiente festivo que vivimos en Sudáfrica 2010, que en eso era brillante, aquí se ha perdido por completo, y nunca tendremos esa sensación de fiesta internacional que sí había en 2010. Otro asunto que no ha gustado a muchos jugadores ha sido la erradicación de la fase de clasificación de la Euro, teniendo, ?únicamente?, la fase final y los clásicos desafíos que ya se instauraron en el juego de la anterior cita internacional. A lo largo de los próximos meses, como ya pasó entonces, irán aumentando según avance el campeonato.
Divertido es el modo Expedición, que debuta en la presente entrega. Tomaremos una selección de zarrapastrosos jugadores random de todo el continente para ir viajando por los distintos imperios futbolísticos europeos para vencerlos y añadirlos a nuestra escuadra imaginaria. Comenzaremos jugando contra selecciones de baja categoría e iremos accediendo, según las distintas rutas que tomemos dentro del modo, a otros equipos más potentes con futbolistas de categoría mundial. El modo exige jugar varias veces contra cada escuadra para conseguir sus jugadores más importantes e ir completando un mosaico de la Eurocopa, que aumenta según vamos ganando partidos y cumpliendo retos. El afán completista de los jugadores invitará a descubrir todo el mosaico y ganar el rico trofeo o una buena cantidad de logros. A por ellos, oe.
Manolo Lama y Paco González serán los encargados de narrarnos la Euro.
Una lástima, puesto que ya estábamos acostumbrados a escuchar a Javier Lalaguna y Pepe Domingo Castaño en estos títulos especiales, pero lo que sí es censurable es que nos encontremos, prácticamente, con los mismos comentarios caducos que ya conocíamos de anteriores capítulos. Pocas excepciones se han añadido a la biblioteca de audio con referencias a la Euro 2012, y eso desluce, irremediablemente, lo que vemos y oímos en pantalla. Insisto lo que dije en el pasado análisis de FIFA 12: los sonidos necesitan una revolución profunda, y creo que en FIFA 13 no nos van a sorprender tampoco. Reconozco que me comería encantado mis palabras y desconfianza.
Conclusión: ¿Qué valoráis más? ¿40 euros o una evolución del juego y detalles que hagan inolvidable la cita internacional virtual? Es un debate que debes tener claro antes de hacerte con él, puesto que te encontrarás, básicamente, a un FIFA 12 disfrazado de Euro 2012 y eso no gustará a todo el mundo. Si Luxemburgo, Macedonia o Malta te chupan un pie no te importará lo más mínimo que estén licenciadas, pero el caso de Ucrania no tiene excusa posible.
El que quiera ver evolucionar su FIFA 12 no tendrá motivo para comprar Euro 2012 y tendrá que esperar a FIFA 13; al que le apetezca simular una Eurocopa tendrá que pasar por caja ¿En qué bando estás tú?
NOTA FINAL: 6
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