Avance Sonic Generations PS1

Green Hill es precioso. No hay duda de ello, y es el símbolo de Sonic igual que es para Mario su primer nivel con la colocación de cada una de sus cajas y enemigos. Pero os podemos asegurar una cosa: nunca lo habréis vista tan bonito como luce en Sonic Generations, donde es una gozada y casi un castigo divino tener que ir lo más rápido posible y no pararse en cada uno de sus detalles, con esos fondos difuminados por la profundidad de campo o esa cascada dibujando un efecto de agua totalmente precioso. Y es que a la hora de dibujar fondos como cuadros hay pocas compañías que tengan mejor mano que Sega.

Comenzar Sonic Generations es extraño. Todo está igual, pero, al mismo tiempo, todo es distinto. Cada una de las plataformas está en el mismo lugar, sin embargo, todo está definido, con una cámara algo más cercana a la acción que nos deja introducirnos perfectamente en el entorno selvático del erizo. Y comienza la carrera. En un instante, nuestro Sonic clásico empieza a coger velocidad y nuestras manos vuelven a trazar las mismas directrices que llevan haciendo durante veinte años.

Es cierto, es un remake, o un homenaje, depende de los ánimos que tenga cada jugador para con la saga, pero el juego se inclina, se disculpa, esperando simplemente tu sonrisa al recorrer el Zone 1 tal y como lo reconoces y entonces es cuando saca el conejo de la chistera. El mundo cambia, y el Sonic moderno empieza a recorrer el escenario en el segundo nivel casi sin tocar el suelo, con ese Turbo Boost que hace que las cosas vuelen, y aquí es cuando empiezas a comprender, por primera vez, que esto no se trata de un simple remake, sino de un Sonic totalmente nuevo. Y vaya si lo es.

Los escenarios recorridos con el Sonic moderno en un habitat tan familiar como lo ha sido siempre Green Hill se tornan, por lo pronto, totalmente desconocidos. La cámara se retuerce para realizar las tomas del erizo siempre desde el mejor ángulo, y cuando por fin gira los temidos noventa grados y se sitúa a su espalda, no podemos más que maravillarnos por cómo han cambiado las cosas, no sólo con respecto a la franquicia, sino con respecto a Sonic Colours que ya de por sí comenzó a hacer las cosas bien. Se han incluido un montón de momentos guionizados, tan sólo por el puro hecho del espectáculo, como mortales hacia atrás, zonas que se desploman, o monstruos gigantes que nos persiguen aunque nunca nos alcancen. En estos momentos con la cámara a la espalda, también podremos manejar de forma más intuitiva la dirección que tomar con ayuda de los botones superiores del mando, esquivando ciertos obstáculos o yendo por el camino más adecuado. A su vez, también habrá obstáculos que pondrán a prueba nuestros reflejos, obligándonos a agacharnos en el momento justo o a saltar antes de que el rail deslizante termine.

Como decimos, el escenario gira y gira y se divide en un diseño tan enfermizo que lo único que puedes hacer es seguir adelante, intentando no chocarte contra nada, intentando no perder toda la velocidad ganada y sin lograr explicarte como sería verlo con la cámara de uno de los desarrolladores, que han convertido este Green Hill en un verdadero laberinto de hormigas, lleno de caminos alternativos, todos adecuados para pasar a una determinada velocidad sin excluir el reto de la partida. Y es que, queramos o no, Sonic guarda más relación con mejorar un tiempo que con cumplir como un plataformas perfecto.

Aún no tenemos todos los detalles, pero creemos que Sonic Generations necesita un sistema que guarde tus tiempos y los compare con el de tus amigos, con una especie de plataforma a lo Autolog de Need for Speed para poder hacer que el pique no termine, porque realmente este Sonic hace que queramos recorrer una y otra vez los escenarios para conseguir ese nivel de fluidez sin estancamientos que tanto ha exigido siempre los buenos juegos de la franquicia y de lo que tanto bebe Mirror's Edge. No sabemos aún si será el mejor Sonic de todos los tiempos, ya que Green Hill tiene esa particularidad de embobar al jugador con su gama de verdes, por lo que aún tenemos que pasar por la planta química y demás niveles para ver si el encanto continúa, pero hasta donde hemos llegado, Sonic Generations no sólo hace honor a su nombre, sino que podría llevar perfectamente el nombre original, y esta vez sí sería todo un orgullo.

Ficha técnica

Salida: Octubre 2011

<< Anterior Siguiente >>