1. Mundogamers
  2. Avances
  3. PS1

Avance Vanquish PS1

Martes 31 de Agosto de 2010 por Omar Álvarez


En tan sólo una hora de juego, Vanquish consigue deshacer a pedazos todos los pilares en los juegos de acción se apoyaron durante esta generación, con esa facilidad con la que Platinum consigue que seamos absolutos esclavos de un control completamente orgánico.

Un remix trepidante de Halo, Gears of War y Bayonetta recrea en un tu pantalla a un personaje con la fluidez y polivalencia de la bruja de Platinum con la fanfarria de explosiones y edificios derrumbándose de las franquicias de acción occidentales. Este es el factor de éxito de Vanquish: nunca el desorden japonés y la sensatez americana habían affaire semejante en una misma fórmula jugable de forma tan satisfactoria, con un equilibrio perfecto entre el espectáculo, la adrenalina y el control sobre el personaje.

Shinji Mikami diseña una versión fría y casi paródica de la guerra fría, en la que nos envía a un futuro no muy lejano donde EEUU y Rusia siguen enfrentándose por el poder y los recursos. En un ataque completamente inesperado, los comunistas atacan San Francisco reduciéndolo a pedazos mientras amenazan hacer lo mismo con la capital del mundo, cómo no, Nueva York.

En nuestro papel como Sam (uno de los personajes más abstractos que hemos visto, una combinación del hombre Malboro tejano y protagonista de anime japonés, a su vez embutido en un exoesqueleto a medio camino entre un insecto y los robots del videoclip de Björk All is a full of love), tendremos que limpiar a esa ?escoria roja? a base de metralla y patadas a hiper-velocidad. Dejes del propio Solid Snake (esa chulería innata y adicción por la nicotina) junto a un sentido del humor que, aunque insuficiente, sí que concebido por la mirada de un oriental que no consigue tomarse en serio al resto del planeta mundo tras sus fronteras.

A partir de aquí, recoge los frutos de una generación sumisa por el tiempo bala de Matrix, misiles esquivables mediante triples mortales y armaduras blancas diseñadas en fibra de carbono y tendrás Vanquish. Un juego de acción de coberturas sí, otro más, pero sin el acartonamiento de un Gears of War común y con la orquestación de una buena escaramuza de Halo. Por primera vez, un juego de acción nos permite el control fluido y prácticamente volátil de un personaje, en un entorno sólido y de continuo peligro, sin transformar la acción en un sin vivir de balas y cadáveres, obligando al jugador a ser el único partícipe de sus éxitos y fracasos.

El desarrollo de Vanquish no deja respiro: y esto es precisamente lo único que nos aterra. Ante el envite continuo de enemigos (en la habitual escala de valor, desde los molestos y numerosos don nadie hasta los gigantescos jefes finales, eso sí, todos y cada uno de ellos en forma robótica, cada cual más grande y más aberrante) Platinum parece no haber dado el brazo a torcer (como puede suceder, en un Call of Duty o Gears of War al uso) dando al jugador ciertos respiros, ciertas distancias, para que le apetezca volver a la acción de forma desmesurada. Los silencios no van con ellos aquí sólo hay lugar para el compás de 4/4.

Este primer contacto nos deja con la boca por los suelos pero lanza una advertencia: del control, posibilidades y carácter de Vanquish, estamos seguros de que durante toda la generación, el resto de juegos de acción estarán condenados a ser humillados con cada comparativa. No obstante y que Platinum no se relaje, al igual que sucedió en otras obras de Mikami/Platinum/Capcom, como God Hand o P.N.03, el abandonar a su suerte el desarrollo y el ritmo pueden castigar a pena de muerte una estructura jugable tan impoluta como la de Vanquish. Un Tour de Force, que esperemos sepa controlar sus impulsos.

Ficha técnica


Salida: 22-10-10

Vanquish

Vanquish

Vanquish

Vanquish

Vanquish

Vanquish

Vanquish

Vanquish

Vanquish


<< Anterior Siguiente >>