Street Fighter V y los malditos Rage Quitters
Street Fighter V se va curando de su largo catarro. Poco a poco, y con los dedos cruzados, vamos teniendo mejores combates en el entorno online, aunque Capcom ya advierte que Europa no es, precisamente, donde los problemas están totalmente solucionados. La pena de esta versión 1.01, de esta porción del juego total, no es realmente los problemas en el modo online, son los otros defectos que muestras un irregular entendimiento de este longevo fighting game.
Ya hablamos en su momento de la carencia del modo desafío, uno que se hizo fundamental cuando nos lo dejaron probarlo y aprendimos, gracias a él, los delicados timing de los combos. También de la ausencia del arcade; que ojo, con una buena modalidad de retos habría quedado perdonado. Ahora hablamos de un problema que empieza a hacerse más notable con el paso de las semanas: los rage quitters.
Si estáis en este artículo y no sois unos paganos en estas lides sabréis lo que es un rage quit: que te ganen y te desconectes para que no se recoja tu derrota en el sistema. Ya hay muchos videojuegos que castigan y penalizan a los que cometen esta práctica, hasta la Playstation 4 nos tira de las orejas si la apagamos sin cariño. Lo del rage quitting es un problema, porque si ganas no te llevas esa victoria a tu contador, fastidia el flujo de las partidas y te hace pensar lo tonto que es tu oponente por molestarse en desconectarse y no perder puntos en un videojuego, en fin.
Pero el rage quitting (desconexión furiosa) se vuelve una opción muy tentadora cuando pierdes una partida por culpa del lag, cuando para llegar a ella has tardado en conectarte y luego, aún por encima, te ganan aprovechándote de esta situación, que ocurre mucho, ¿por qué he de perder mis puntos de liga si no es culpa mía? Es decir que los problemas que persisten en el online de Street Fighter V impiden ver el motivo por el que los aficionados a este género entendemos este título como maravilloso, y generan otros nuevos, o los potencian más bien.
Por fortuna, Capcom ya se ha dado cuenta de esto y también promete solucionarlo, pero por ahora pide que jugadores denuncien a jugadores. Hoy es día uno de marzo, y este es un mes crucial para este desvirgamiento de Capcom en los juegos episódicos que pretenden forjar una férrea comunidad a su alrededor. Llegará una nueva versión del título, nuevos modos y ya cuentan con el feedback necesario para saber qué problemas solucionar. Por ahora, las tiendas de segunda mano ya dan fe en sus estanterías del rage reselling de sus compradores enfadados. A ver cómo llegamos a abril, pero pidiéndole a jugadores enfadados por un online irregular que señalen con el dedo a otros aún más enfadados, no creo que sea la solución.
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