¿Quién te manda a ti meterte en Japón, Xbox One?

La consola de nueva generación de Microsoft, Xbox One, se lanzará en Japón este 7 de septiembre, 10 meses después de que lo hiciera en buena parte de occidente, donde, sin embargo, aún quedan países como Finlandia o Noruega sin recibirla. Así que yo me pregunto, Microsoft, ¿para qué te molestas si no tienes nada que ganar y mucho que perder en Japón?

 

Si existe una consola que resume mejor la forma de hacer videojuegos de occiente, esa es Xbox, casa de Call of Duty, juego que en Japón importa menos que un pedo porque allí les gustan cosas que solo publican, y en cantidades ingentes, Nintendo para 3DS y Sony para PSP, PS3, Vita y, imaginamos que pronto, PS4. No se trata de un problema de plataforma, que en cierto modo también (Nintendo y Sony son japonesas); sino de juegos.

 

Microsoft se empeña en que el lanzamiento en Japón de Xbox One vendrá acompañado de una buena cantidad de títulos desarrollados para el público nipón, pero no ha dado un solo nombre. Y Platinum Games, que se supone iba a tener un título exclusivo para Xbox One, no aparece en esa lista de desarrolladores. ¿Se estarán guardando un as en la manga? A saber.

 

 

El caso es que hasta cuando Nintendo tiene problemas para llegar a sus usuarios fieles con Wii U, ¿qué va a hacer esta vez Microsoft para vender su consola? Ni sacar la billetera para conseguir la exclusividad con sagas imprescindibles les ayudó con Xbox 360, así que empiezo a pensar que esto se trata de una cuestión de imagen. ¿Xbox One se lanza en Japón porque no salir en el país que casi es el origen de facto de los videojuegos modernos sería un problema para su imagen? 

 

Aún así, ojalá me equivoque, porque no quiero que Sony tenga todas las de ganar en ninguna parte. Cuando se duermen en sus laureles, pasan cosas como el precio de PS3. 

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