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¿Qué nos espera en las ferias de este año?

Para bien o para mal
Por Víctor Junquera

Tenemos una serie de eventos únicos a lo largo del año, son citas ineludibles para aquellos a quienes nos gustan los videojuegos, pero claro, cada vez hay más de estos eventos por todo el mundo, y los más grandes pueden estar perdiendo valor.

 

No será algo que ocurra de la noche a la mañana, claro, pero viendo cómo ha triunfado la PlayStation Experience, o cómo el formato de los Nintendo Direct cuaja tanto como una gran conferencia y permite ser repetido varias veces a lo largo del año, o incluso cómo tanto Sony como Microsoft decidieron presentar sus nuevas consolas fuera del E3, no sería raro que poco a poco, estas E3, Gamescom, TGS y demás ferias del año acaben perdiendo algo de importancia como espectador, e incluso como asistente, cuando muchas compañías ya nos han permitido probar todo su catálogo de anuncios una semana después del evento de Los Angeles bien cerquita de casa.

 

Son eventos que tienen una magia especial, claro está, y basta con que haya un par de años poco o nada destacables y queramos tirar la toalla con esto de las ferias para que de repente un año haga que volvamos a tener fe. 'El próximo E3 será decisivo'.

 

Gente jugando y explicando, mucho mejor que un invitado random haciendo el tonto en el escenario.

 

Las últimas ferias también nos han demostrado que al final acaba resultando mejor para dar a conocer los juegos, no sólo permitir probarlos (de nada sirven tráilers que no dicen nada como el de Phantom Dust), sino mostrarlos en profundidad y desde la cercanía de una cobertura en directo como la realizada por Nintendo en el E3, por Microsoft en la Gamescom, o por Sony en la PlayStation Experience. Twitch no ha empezado en esto de las ferias como 'el futuro' y la revolución por sus problemas técnicos y sus sobrecargas (que somos muchos interesados, claro), pero el directo ha demostrado ser una de las mejores formas de comunicación.

 

Lo que sería bonito de verdad es que con todo esto, las conferencias dejasen de ser tanto 'mirad este tráiler cinematográfico que no os va a decir nada' y fuesen un poco más 'tenemos este juego, que es así y sale este día'. Queda muy bien jugar al despiste y a impresionar, pero cuando la verdad acaba saliendo a la luz (y sale) y es ligeramente diferente a lo prometido (caso Rise of the Tomb Raider), el efecto no es tan positivo.

 

Gente trabajando en el nuevo Mass Effect, mucho mejor que un tráiler que no nos dice nada.

 

¿Qué esperar entonces de las ferias de este año? No tocaría hardware nuevo, y tenemos el 2015 bien servido de juegos para ir aguantando sin necesidad de pensar en que 'hacen falta más megatones', pero si, claro que hacen falta. Acabamos de empezar 2015 y ya queremos saber qué llegará en 2016 y 2017, y eso es lo que nos darán estas ferias, aparte de, cómo no, lo que veremos a finales de año entre las ya clásicas sagas anualizadas.

 

Aquí todos podemos sacar a relucir las bolas de cristal, va. Habrá más de Halo 5 y más de Uncharted 4, claro, pero con estas consolas va siendo hora de tener otra confusión de siglas y que God of War y Gears of War asomen sus patitas llenas de testosterona. Y puede que no vaya a haber un Mario nuevo en 2015, pero al menos pueden anunciarlo, ¿no? Quizá un Galaxy 3. Y Metroid, que me den ya mi maldito Metroid. Y que EA nos haga temblar con Mass Effect 4 y que Ubi vuelva a intentar que recuperemos el interés en sus sagas (porque Watch Dogs será una saga y la segunda parte está más cerca que lejos), o que saquen de una vez Beyond Good & Evil 2.

 

Pero luego se nos caen los pantalones con esto... ¿Qué queremos exactamente de un E3?

 

Y esto es lo que la mayoría pide de un E3. Y no se pide por alguna nueva licencia. ¿Para qué queremos entonces tanta farándula si nos conformamos con un nuevo tráiler de algo que ya conocemos?


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