Nintendo y los youtubes

Ah, Nintendo, qué innovadora y lista eres para algunas cosas y qué pillina y a anticuada eres para otras muchas. No sé si sabéis que Nintendo se puso pelín estupenda con los vídeos que se subían a YouTube sobre sus juegos y que impedían que los youtubers obtuviesen beneficios publicitarios a partir de contenido que, bueno, les pertenecía a ellos. Del mismo modo que terceras empresas no pueden usar la imagen de Mario para promocionar su producto, no se puede usar un vídeo de un juego de Mario para sacar dinero, incluso si es con una crítica o una investigación.

 

Es algo lógico en el fondo, y aunque muchas empresas de videojuegos prefieren renunciar a la pecata minuta que se produce con los videos de YouTube a cambio de ganar esa promoción que les sale gratis, Nintendo tiene todo el derecho del mundo a no querer que esto sea así. Por eso ha lanzado un programa de fidelización con los youtubers, permitiendo que estos se lleven el 60% de los beneficios de vídeos individuales o el 70% si se registra un canal completo al hablar de juegos de Nintendo.

 

 

Parece un acuerdo aceptable y un buen porcentaje, pero claro, plantea unas cuantas cuestiones problemáticas. En primer lugar, ¿está bien que Nintendo se lleve un 40% del dinero por publicidad que produce un vídeo de YouTube que funciona como una crítica de su juego? Imaginad lo feo que estaría que Nintendo se llevara un porcentaje del dinero que producimos en Mundogamers al hablar de sus juegos. Pues eso en YouTube será obligatorio.

 

Y luego están los problemas que plantean sus normas para formar parte de este programa de partners. En primer lugar, hay que esperar tres días antes de que Nintendo apruebe un vídeo y permita que se saquen beneficios de él con su permiso. Esto, llevado a una review, con una fecha de embargo, significa tener el juego acabado y el vídeo listo tres días antes de un embargo, algo que ya de por sí cuesta mucho cuando solametne hay que jugar y escribir. Es ridículo, vaya.

 

 

Aún queda mucho por aclarar de las políticas de este nuevo sistema, como por ejemplo, si Nintendo puede reducir o aumentar ese porcentaje dependiendo de visitas o de canales concretos; pero de momento, a mi no me gusta demasiado lo que plantean. Sí, permite hablar de juegos de Nintendo ganando dinero, pero tener que estar un poco a su servicio destruye por completo mucho de lo genial de hacer vídeos en YouTube.

 

Sea como fuere, siempre podría ser peor: Sega no permite nada de nada y ha llegado a cerrar canales de YouTube con contenido sobre sus juegos. Warner Bros impuso un montón de mierda a los youtubers durante la cobertura de Sombras de Mordor. Y podría seguir contando historias para no dormir un buen rato. Al menos Nintendo ha dado el paso para adaptarse a los tiempos, incluso si el paso es en falso.

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