¿Nathan Drake o los hermanos Frye? Yo lo tengo claro
Han pasado ya de las doce (probablemente cuando leáis esto, será todavía más tarde. O más temprano, según se mire), estoy aquí, cenando un potito de frutas variadas como cualquier otro ser humano adulto, y me he dado cuenta de una cosa muy curiosa: Estamos a uno de octubre. No, no, en serio, guardad los aplausos para después porque todavía no he dicho lo más interesante: Dos sagas titánicas (dentro de lo que cabe) coinciden con su lanzamiento estrella de este año en este mismo mes. Y es que el día 7 saldrá a la venta Uncharted: The Nathan Drake Collection, mientras que el día 23 lo hará Assassin's Creed: Syndicate. Aquí van a llover chuzos de punta. Pero en forma de hostias. Déjenme.
Vayamos por partes. Estamos ante lo que se supone es un lanzamiento estrella per se, el de lo nuevo de Assassin's Creed, ya que el juego de Naughty Dog no es más que una recopilación. Así que nuestras mentes deberían centrarse únicamente en lo más nuevo, y no en esos packs recopilatorios que intentan vendernos cada x tiempo con la intención de que nunca escapemos de las sinuosas redes de las compañías. Mas, no, creo que Uncharted estará por encima de Assassin's Creed. Lo siento por los hermanos Frye, pero el encanto y la personalidad del guaperas de Drake les ha superado, y con diferencia.
Debo ser sincera: A mi Syndicate me cautivó desde el primer momento. Un Londres victoriano y Assassins tenía buena pinta. El modo sigiloso de hacer las misiones por parte de Evie Frye me encantó y me atrajo todavía más, pero el rudimentario (al menos a simple vista) Jacob echa para atrás, y tiene pinta de que él es el protagonista y su hermana no es más que un secundario con cierta personalidad. Es una pena, pero creo cuanto más conozco de Jacob, menos me gusta el nuevo juego de Ubisoft.
A todo esto hay que sumarle un pequeño detalle que, al final, será el que marque la diferencia. Mientras que la hasta el año que viene trilogía de Uncharted no ha defraudado en ninguno de sus títulos, Assassin's Creed fue empeorando con cada año que pasaba. Que sí, que todo fue culpa de la explotación que sufrieron los desarrolladores para intentar sacar un juego por año, esa cantinela ya me la conozco. Pero la baja calidad de algunos aspectos de los juegos se hizo muy notable y la gente comenzó a menospreciar lo que podía haber sido una gran saga. En cambio, cada juego de Uncharted era mejor que el anterior, y no es que podamos escudar a los de Ubisoft con un “ya, pero es que tienen menos juegos”, porque sólo hay uno de diferencia.
En fin, que también debemos tener en cuenta que Uncharted: The Nathan Drake Collection no sólo viene antes que su rival, sino que viene con muchos extras y es una muy buena oportunidad para aquellos que se perdieron los juegos en la generación anterior. Vamos, que es una apuesta segura. Yo he probado ambos títulos y, por mucho que me llevase una hora paseando con toda la tranquilidad del mundo por las calles de Londres, me quedo con Nathan Drake. O al menos lo haría, si tuviera una PS4.
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