Los huevos de pascua tendrían que ser decoración común

En Fallout 4 hay un montón de huevos de pascua, y eso está muy bien pero ¿están bien designados estos como huevos de pascua? Ya se han encontrado muchos, algunos relativos a Tiburón, a Alien, a Toy Story 3, a Cheers… encontrarlos es muy divertido, pero hay también otra lectura con ellos: hitos en el yermo, en edificios y en diversos rincones que te hablan de la vida que allí se produjo.

 

Si ahora mismo cayera una bomba nuclear y entraran en mi casa, también encontrarían un montón de esos huevos de pascua al mundo de los videojuegos, del manga y del gafapastismo en general; es decir, que más que detalles secretos son una manera mucha más sincera de hablar de la vida de un individuo que organizar un bodegón en una estancia.

 

 

Fallout 4 está lleno de estos montajes teatrales. Hallamos trampillas para saltar al vacío y suicidarse en los altos de los edificios, con cajas de droga al lado, hombres encerrados en su habitación muertos, con cajas de droga al lado, y cocineros muertos intentando cocinar perros en su desesperación con cajas de drogas al lado. Sí, los vendedores de cajas de drogas se hicieron de oro antes del apocalipsis nuclear. Estos montajes funcionan muy bien para entender qué sucedió ahí, pero como veis, son un puro montaje.

 

Los huevos de pascua, por su parte, son capaces de funcionar de manera más directa y automática para el lector. Si directamente te plantan el código de la Nostromo en la parte trasera de un artefacto pues sabemos que el dueño es un aficionado a Alien, al cine o a la ciencia ficción, y así podemos definir la personalidad de alguien a través de cómo está preparado el escenario, pero sin tener que recurrir a montajes tan elaborados.

 

Conste que claro que se llaman huevos de pascua porque lo son, porque son detalles anecdóticos, pero no estaría nada mal que se diera el siguiente paso adelante y se convirtieran en detalles más obvios, no tan escondidos y pensados a propósito para contarnos más detalles de los personajes que pueblan el lugar, por poner un ejemplo, me gustaría ver un poster de Dick Tracy en la habitación de Nick Valentine o un disco de vinilo de de Miles Davis.

 

Falta este punto de decoración desvergonzada y real en este tipo de obras de ficción, porque el jugador tiene la capacidad de explorar en ellas e interactuar, y esta exploración tanto se enriquece si se encuentran estos detalles únicos y pensados para cada personaje, que apelen a sus gustos, como se empobrece si solo se sabe decorar con tres modelos genéricos que se encuentran en todas las casas del mundo de juego.

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