La guerra por los 1080p no avanza

Antes incluso de que dé comienzo la nueva generación de consolas, se está discutiendo por cifras y no por juegos, así de absurdos somos. No se discute sobre si una tiene Killzone, Knack, inFAMOUS y Driveclub y la otra tiene Forza, Ryse, Killer Instinct y Dead Rising, sino sobre si Battlefield 4 y Call of Duty: Ghosts corren a más o menos resolución en una y en otra, y la verdad, tenemos tanta culpa los usuarios por darle importancia al tema como los desarrolladores por no cumplir, ya no con lo prometido, sino con el mínimo exigible.

 

Entre Xbox 360 y PlayStation 3 también hubo muchas disputas durante sus primeros pasos al respecto. Que si PS3 es más potente y tiene HDMI para sacar Full HD, que si con el cable de componentes sólo se puede sacar 1080i escalado en Xbox 360,... Todo eso en uno de los muchos intentos de ver quién la tiene más larga, para que al final el primer juego de la generación a 1080p fuese Virtua Tennis 3 en Xbox 360 y ni siquiera se le pudiese sacar partido. Una discusión olvidada a estas alturas, parece que a nadie le importaba la resolución salvo a los sufridores de Wii, hasta que llegaron las nuevas consolas y los supuestos nuevos estándares.

 

Tenemos dos consolas más capaces que las actuales en el horizonte y lo mínimo que podríamos esperar es que todo funcionase, como mínimo, como funciona hoy en día un PC de gama alta, garantizando 1080p y 60 frames por segundo sin ningún problema, pero la realidad es muy distinta. Microsoft ha asegurado que todos sus juegos se verán a 1080p, sí, pero reescalado, lo cuál implica una ligera mentira para algunos y un crimen atroz para esos con ojos biónicos capaces de captar las más sutiles diferencias.

 

El propio Mark Rubin de Infinity Ward ha confirmado que Call of Duty: Ghosts correrá en 1080p y a 60 fps en PlayStation 4, pero que, no por falta de trabajo sino por falta de costumbre (y tiempo) a los kits de desarrollo de Xbox One, han tenido que bajar la resolución hasta 720p para garantizar los 60 fps estables, una tasa que debería ser mucho más motivo de discusión que la resolución. Pero eso de 720p no quiere decir que lo vayamos a ver como aquí el amigo Peter Parker (gif cortesía, cómo no, de NeoGAF). También ha afirmado que el próximo Call of Duty cumplirá los famosos requisitos de 1080p y 60fps en ambas plataformas.

 

Battlefield 4, por otro lado, ni en una ni en otra. 720p en One y 900p en PS4, eso sí, ambas versiones a 60 fps bien estables. Assassin's Creed IV: Black Flag ni resolución ni frames por segundo estables. 720p y 30-40 fps con caídas para ambas versiones, aunque Ubisoft también se inclina por una versión ligeramente mejor y más estable en PS4.

 

 

Tanto blockbuster y no son capaces de conseguir lo que ha hecho 2K con NBA 2K14, que además de cambiar y mejorar la experiencia y del lavado de cara gráfico, han conseguido 1080p y 60fps estables tanto en Xbox One como en PlayStation 4.

 

Si la auténtica pelea fuese por cuestión de cifras que implican estabilidad, la gente se estaría peleando por una Wii U, que aunque esté viviendo en su propia generación al límite, está cumpliendo a rajatabla con todas sus exclusivas a 1080p y 60fps. E incluso hablando de catálogos actuales la consola de Nintendo debería ganar estas Navidades, pero eso es otro tema. El caso es que ni con los juegos exclusivos predican el ejemplo Xbox One y PlayStation 4.

 

Forza Motorsport 5 y Killzone: Shadow Fall son los únicos exclusivos de cada consola que han conseguido garantizar los 1080p y 60 fps. Kinect Sports Rivals (aunque se vaya para el año que viene) irá a 1080p pero a 30 fps, un crimen si se pretende emular el movimiento del cuerpo con precisión y la imagen no responde correctamente. Ryse: Son of Rome, 1080p reescalada de 900p nativa y 30 fps, Dead Rising 3 que a duras penas alcanzará esos 30 fps, Killer Instinct que logra los 60 fps a costa de bajar la resolución a 720p... Por otro lado, Sony parece tenerlo más cubierto, pero con juegos que muestran mucho menos músculo, como Knack, a 1080p y unos cerca de 60 fps no estables, Resogun, un título en el que sería difícil no alcanzar el estándar, o Driveclub, que ha tenido que ser retrasado para no llegar con aspecto de la década pasada.

 

Con todo esto, ¿de verdad es una discusión tan a tener en cuenta? «-Ha ha, pringao, mi versión corre a 1080p nativa y la tuya sólo es reescalada. +Ha ha, pero yo tengo el DLC antes que tú.» El problema lo tienen ambas consolas si no pueden llegar a lograr la resolución y el framerate máximos como estándar, porque entonces estaríamos hablando de un salto generacional con el consecuente gasto, sólo para ver más partículas y mejores texturas en pantalla.

<< Anterior Siguiente >>