Hay que saber perder

Me gusta perder en un videojuego; no digo morir y morir y morir en un título que sea más difícil que comprender el final de Interstellar, sino que la propia derrota esté incluida en el guión, que la historia siga tomando en cuenta no haber sido capaz de superar un reto y poniendo al adversario que te ha derrotado en un pedestal. Es una manera de poner límites al excesivo poder que suele alcanzar nuestro personaje en un videojuego, que puede matarlo todo, y cuando no, siempre puede resetear la partida y volver a intentarlo.

 

Heavy Rain, con todas sus cosas reguleras, supo integrar esto de manera formidable en su gameplay, con un guión que seguía pasara lo que pasara y adaptando la entrega de su trama a nuestros errores y muertes. Por supuesto, fallar significa perder algo en el videojuego, pudiéndote llegar a quedar sin saber quién es el asesino. No siempre es tan duro fallar, pero te recuerda que no eres Dios. Al iniciar Kingdom Hearts se te enfrenta con Leon, al poco tiempo de que te hayas tragados los tutoriales de combate. La pelea es dura y lo normal, la primera vez que coges el juego, es que pierdas, desvelándote que el videojuego va a contar con rivales duros; pero también puedes ganar, porque hace falta esa posibilidad para que la derrota funcione de manera coherente.

 

 

Inazuma Eleven GO Chrono Stones acaba siendo sencillo a medida que vas consiguiendo todas las armaduras, espíritus guerreros y miximax, algo así como distintos niveles de poderes saiyan; por eso, hay un momento en el que el videojuego te hace enfrentarte contra tu propio equipo dejándote a ti solo con el protagonista, un compañero y el resto un once sin ninguno de estos poderes. Yo perdí, y la historia continuó pero hablándome de mi dependencia de estas habilidades para la victoria sin decírmelo, se aprende con la derrota.

 

Demon´s Souls usa también esta triquiñuela al principio del videojuego para hablarte de su dureza, con un enemigo que te tumba sin consideración enviándote para el otro barrio; y me imagino que se podrá derrotar, yo al menos no lo he visto y no pienso intentarlo.

 

Es necesario perder, y es necesario que el videojuego sepa seguir tras tu derrota. Hay pocas cosas peores que sentirte el ser más poderoso del universo que plantea uno u otro título, porque si crees que no tienes rival, dejarás el videojuego por falta de reto. Aunque por fortuna, como le decía Popo a Son Goku cuando llegó a la casa de Dios, siempre te encontrarás a alguien más fuerte que tú.

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