¿Es Prey for the Gods igual a Shadow of the Colossus?
Prey for the Gods tiene buena pinta, sabe usar la climatología invernal para construir una ambientación particular, sabe emplear un lobo para sacarte de las garras de la muerte y darle sentido al continuo revivir del héroe, y la promesa de apostar por unas mecánicas que te permitan sobrevivir a las gélidas tempestades es una que quiero probar. Todo eso está muy bien y no necesita el peso de una losa tan gigante como querer ser el heredero de Shadow of the Colossus.
Además de que la manía de querer imitar cualquier juego de Fumito Ueda aburre, Shadow of the Colossus es mucho más que presentar un mundo de juego mudo con bichos grandes a los que subirse a la chepa, es la construcción de una historia autodestructiva de un héroe que asesina a seres vivos de manera egoísta por salvar a su amada, solo que estos tienen una forma colosal que los acerca a la idea que tenemos de bosses, lo que valida que queramos y podamos matarlos.
Las comparativas funcionan como una primera presentación para que el jugador conozca a lo que se enfrenta, pero hay que saber ir más allá. Prey for the Gods emplea a sus monstruos de una manera que ya desde los trailers se anuncia distinta: como reyes de una zona, como gobernantes de un área inhóspita que logran que así lo sea. Al jugar al título de Team Ico, y llegados a la mitad de la aventura, sentimos lástima por los colosos que masacramos y nos preguntamos si realmente hemos de matarlos, porque ellos no son majestuosos líderes, tan solo seres que viven en sus refugios, unos que hemos de buscar e invadir, para asesinar.
El propio mundo de juego te invita a matarlos. El trailer de presentación de Prey for the Gods, sin embargo, muestra a un lobo que te recoge cada vez que mueres, devolviéndote a tu misión y añadiendo un cariz mágico a la resurrección del protagonista, condenado a caer cada vez que se enfrenta a sus colosales gigantes. El héroe se muestra como una víctima de los sucesos del juego, no como un asesino voluntario para conseguir un fin. Es por estos matices por los que Prey for the Gods me interesa, y son unos que se pierden al establecer comparativas con Shadow of the Colossus; sí, hay gigantes, sí, hay que matarlos, pero es solo una aproximación superficial.
Pero, por supuesto, las comparaciones son necesarias. Desde aquí os invito a partir de ellas pero superarlas para ver las intenciones reales que se esconden en el prometedor Prey for the Gods; que luego sale e igual es un cagarro copiado de Shadow of the Colossus, todo puede ser, pero no por ello no hemos de esforzarnos en adivinar su verdadero corazón.
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