Nacimiento de Xbox One
Tanto tiempo esperando y al final ni Xbox 720 ni Durango, sino Xbox One, el nombre con el que Microsoft bautiza su salto a la nueva generación. Quizá no sea un nombre explosivo o nos marque una consecución, puede que haya problemas de nomenclatura entre 'la primera Xbox' y la 'Xbox One', pero con ese One nos deja claro que pretende ser algo totalmente diferente. Única.
Conforme han revelado el nuevo nombre, nos han comentado que dispondrá un procesador de ocho núcleos, el lector y reproductor de Blu-ray que ya esperábamos y 500 GB de disco duro. Por aquí todo parece asemejarse en potencia a PS4, pero de momento vamos a necesitar más información que Microsoft aún no ha facilitado, al contrario que Sony que quiso poner las cartas sobre la mesa.
Si teníamos algo de miedo a que nos presentasen un centro multimedia, en un principio eso es lo que nos ha parecido. Ver la tele, interactuar con las tablets vía Smartglass,... Pero una nueva generación seguro que tiene mucho más debajo de la manga. Por lo pronto Electronic Arts nos ha mostrado su gran interés en Xbox One con sus clásicos lanzamientos deportivos con exclusividades en forma de contenido adicional para esta plataforma. Forza 5 ha pasado de forma fugaz dejando ver su detalle con unas imágenes que habrá generado hype a los aficionados de la conducción. Algo que tampoco ha pillado por sorpresa ha sido el cierre del evento con Call of Duty: Ghosts, que ya tenía su lugar asegurado para la próxima generación. En su presentación nos han mostrado cómo aprovechan la potencia de la máquina en cuanto detalle e imagen real, incluso con una comparativa entre Modern Warfare 3 y este Ghosts, ambos firmados por Infinity Ward.
Sin duda, lo que seguramente ha llamado nuestra atención es Quantum Break. Una nueva IP viene de la mano de Remedy. No es Alan Wake 2 pero por lo poco que hemos visto ya estamos deseando saber de qué se trata, aunque sólo sea porque es lo único que se ha dejado ver que nos ha parecido diferente.
No sabemos qué otras novedades traerá la nueva de Microsoft pero lo que está claro es que, si quieren ganar la posición de salida en esta Next-gen, deberán darnos algo más que televisión, Kinect 2.0 y secuelas pintadas con colores nuevos.
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