El mayor problema de PES 2017 puede ser PES 2016
Desde ayer mismo tenemos disponible de forma totalmente gratuita la Demo de PES 2017, la próxima entrega del simulador de fútbol de Konami, cuya versión final llegará el próximo 15 de septiembre. Voy a exponer mi opinión más en profundidad sobre estos primeros partidos en un artículo aparte, pero os voy adelantando que me ha dejado con sensaciones encontradas y todavía no sé muy bien lo que pensar. No sé por qué, pero mientras jugaba los partidos de exhibición de esta nueva entrega no paraba de acordarme de PES 2016, la entrega anterior.
Creo que podría decir sin riesgo a equivocarme que la bonita batalla que vivimos el año pasado entre FIFA 16 y PES 2016 fue la más reñida que hemos visto en muchísimo tiempo, lo que termina convirtiéndose en algo positivo para todos. Obviamente, cada jugador tiene sus preferencias y también es positivo que ambas sagas tengan sus sellos distintivos que puedan convencer o no a cada tipo de usuario, pero desde luego la calidad como producto de ambas obras estaba muy a la par. Lo bueno de la entrega del simulador de Konami es que a pesar de contar con algunas ausencias en el terreno de las licencias, conseguía resarcirse con un muy buen sistema de juego y con inclusiones muy interesantes, como la que hemos podido disfrutar este verano con la UEFA Euro como protagonista.
Sin embargo, como todos sabéis, todo parece indicar que PES 2017 va a volver a venir bastante corto de licencias, sobre todo en lo que a nuestra propia liga se refiere. Aunque todavía no hay nada cerrado y desde Konami comentan que están trabajando en incluir nuevos equipos licenciados, estadios y demás características reales, la realidad actualmente es bastante contundente: solo existen licencias del F.C. Barcelona y el Atlético de Madrid en la liga española, y un puñado de equipos de otras ligas europeas y americanas, pero poco más. Los nombres de los jugadores y sus apariencias sí podrán ser las reales, pero no el nombre de los equipos ni los estadios, lo que puede importar más o menos a más de uno. Es decir, que a no ser que se anuncie lo contrario, vamos a poder controlar a Cristiano Ronaldo, Bale, Sergio Ramos y compañía, con modelados realistas y basados en su apariencia real, pero no vamos a poder disputar partidos con el Real Madrid en el Santiago Bernabéu, por ejemplo.
Si a esto le sumamos lo que parece ser una evolución bastante pequeña a nivel jugable respecto a PES 2016, al menos por lo visto hasta el momento (incluso con algunas características que me han llegado a convencer menos), tengo la sensación de que el mayor enemigo de PES 2017 este año puede ser precisamente la entrega anterior y no tanto FIFA 17. Estamos a punto de vivir otro enfrentamiento futbolístico y yo espero de verdad que pueda volver a ser tan interesante e igualado como el año pasado, aunque por el momento tengo muchas dudas sobre ello.
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