Copiad a The Witness, por favor

Todavía no he hablado de The Witness por aquí a pesar de lo mucho que me flipa este maldito juego. Jonathan Blow puede ser un capullo con la boca demasiado grande, pero está claro que lo suyo es hacer videojuegos, y hacerlos tremendamente bien. Es casi conmovedor ver una mecánica tan reduccionista como es el trazar una línea en un tablero expandirse y expandirse hasta ser algo inmenso, pero a la vez que sigue siendo algo tan sencillo. 

Pero no estoy aquí para hablar del juego como tal, que del análisis se encargará alguno de mis compañeros dentro de poco. Lo que me gustaría apuntar es que esa idea de puzle sencillo que va a más y a más usando otros elementos debería formar parte de todos los minijuegos de hackeo de aquí en adelante. Por favor, queridos estudios desarrolladores de juegos como Deus Ex, Bioshock, The Last of Us y muchos más: entended lo que hace The Witness y copiarlo. 

Creo que hay muchas formas de hacerlo, algunas de las cuales ya se han intentado. Ahí tenéis a Dishonored, que se complicaba mucho la vida dando pistas en textos o grabaciones o pintadas sobre posibles soluciones a una clave de una caja fuerte, pero casi nunca dando al pista completa. Arkane quería que dedujéramos y usáramos un poco la cabeza, y eso hacía que el hackeo, el desbloquear un puzle o lo que fuera resultara mucho más satisfactorio cuando se resolvía. 

Y sin embargo, estos viejos trucos están, eso mismo, viejos. Todos nos esperamos que la solución esté en un texto, en un documento, en una pared, tras un cuadro. The Witness hace que la solución, aunque evidente y obvia, esté escondida en algún aspecto del entorno. Y eso es algo que me encantaría ver, por ejemplo, en un Bioshock en el futuro, por poner un ejemplo. ¿Y si la quemadura de una magia en la pared desvelara esa parte del puzle que no estás viendo? ¿Y si tuvieras que fijarte en las marcas de agua que ha dejado una tubería rota en el suelo para entender el patrón que se te exige en una cerradura? ¡Hay muchas posibilidades!

Como comprenderéis, no pido que un juego que no está centrado exclusivamente en los puzles tire de ingenio como The Witness, que se basa solamente en ellos. Sin embargo, estos forman parte fundamental de todos los demás géneros, pero han dejado mucho que desear y son tan ampliamente predecibles que hace falta innovar un poquito y volver a hacer que nos rompamos el coco. No hay que llegar a extremos como el ya citado o a lo obtuso de las antiguas aventuras gráficas, claro que no, pero algo de mimo no les vendría mal.