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Cómo Nathan se sube al Drakemóvil en Uncharted 4

en relación al Batmóvil de Arkham Knight
Por Adrián Suárez Mouriño

Antes de hablar del coche de Uncharted 4 y cómo afecta incluir un vehículo a una fórmula de juego ajena a la conducción, tenéis que entender que los videojuegos de coche no son precisamente lo mío. Si a vosotros os apasionan, lo más posible es que vuestra opinión no sea la misma que la mía. No digo esto para criticar el jeep que vemos de vez en cuanto en la última aventura de Nathan, al contrario, porque no está incluido como un elemento que apunta al género de la conducción, sino que tiene la maestría de funcionar como un personaje más siempre dentro de la fórmula jugable de Uncharted 4, me explico.

 

Cuando nos subimos al coche lo normal no es hacer carreras, sino explorar y saltar. Subidos al vehículo podemos usar el cabestrante, ascender río arriba y coger carrerilla para aprovechar ciertos elementos del escenario a nuestro favor. Esta manera de llevar un coche a un videojuego de plataformas y aventuras me parece sensacional, porque no hace que el juego cambie de género radicalmente, ni intenta añadir otra capa jugable ajena a él, únicamente sirve para proponer más profundidad a la propia propuesta jugable. Es decir, que los que buscamos un juego de saltos lo seguimos teniendo.

 

 

Menciono esta excelente manera de usar a favor de la propuesta jugable el coche por compararla con cómo se metió el Batmóvil en Batman Arkham Knight. En el último juego del murciélago, su vehículo no sirve solo para apoyar la jugabilidad original, el vehículo lo cambia todo, hay muchas carreras, hay muchos combates sobre el coche y hasta la manera de correr por la ciudad cambia. Con el Batmóvil te encuentras con un juego totalmente distinto a Arkham City. El género de la conducción penetra en el que Batman se afincó con su serie Arkham, se mezcla con él y genera secciones que no saben fusionarse entre sí para que no se note la presencia del coche como sí logra Uncharted 4.

 

Ahora sí recurro a lo que digo al principio del artículo, a que el género de la conducción no es de mis predilectos. La manera de llevar el coche a Arkham Knight no dudo que habrá gustado a muchos, pero disgrega la jugabilidad en demasiados sectores diferenciados, no aporta a la propuesta original, no la acentúa, sino que añade nueva jugabilidad, nuevos tramos propios, unos que no a todos que sí hemos disfrutado con los anteriores Arkham nos ha gustado, porque no es una evolución de la propuesta jugable, es una adición sobre ella. Y creí por ello que mi destino era odiar la inclusión de todo coche en un videojuego de plataformas, y me equivocaba, porque me gusta encontrarme el jeep en Uncharted 4, ¿y por qué? Precisamente por ello, porque aquí sí acentúa el concepto de juego original; sigo jugando a lo mismo pero con otros recursos.

 

Es por ello por lo que me parece tan sobresaliente cómo se hace en el juego de Naughty Dog, cómo controlan bien cada elemento jugable que se añade, tanto el jeep, como la pica para trepar como la cuerda con gancho; no esos nuevos cacharros el videojuego no quiere irse a otros géneros, solo mejorar y continuar con lo que ya hacía bien pero ofreciéndole sensaciones distintas al jugador. Lo fácil es lo de Arkham Knight, ¿que añado un coche? pues añado todo un repertorio jugable aparte para correr separado de la propuesta original. Lo dicho, son dos juegos distintos, son dos ideas distintas, pero pensad lo díficil y sensato que es tener algo tan jugoso como un coche que te permite meter tantos nuevos tramos jugables y decidir que solo se va a usar para quedarse en el mismo género de juego original, es difícil hacerlo y hacerlo bien. Teniendo esto en mente, no he podido evitar pensar en Arkham Knight, y desear que, ojalá, la inclusión del Batmóvil no hubiera sido tan brusca.  


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