Cambiar de plataforma es bueno para una franquicia

A un juego le sienta genial cambiar de plataforma puesto que cada una tiene sus virtudes y defectos, necesidades y exigencias. Un juego móvil tiene que tener cierto margen de gratuidad, una consola portátil ha de moderar sus gráficos y controlar los ritmos de su partida, una consola de sobremesa tiene que presumir de técinca y ofrecer experiencias más trascendentes. El paso de un videojuego de una plataforma a otra le permite conocerse más a sí mismo, y cuando el título vuelve a su plataforma original se trae consigo esas ideas.

 

Reciéntemente Pokemon ha decidido largarse de las consolas portátiles de Nintendo y dar un brinco a los móviles. Lo habíamos visto antes coquetear con Nintendo 64 y tendremos también ese Pokkén Tournament. Entre todo ello se van preparando ideas nuevas que tendrían que germinar en un nuevo juego de Game Freaks; por fin de consolas de sobremesa en el que tanto la portabilidad de la caza portátil como las batallas con modelados más grandes y detallados aporten sangre nueva.

 

 

Y es que es así como se tienen que aprovechar los saltos entre plataformas, cambiando radicalmente las ideas preconcebidas. También se puede hacer mal y es algo que ha sufrido la PSVita con ese Black Ops y ese Borderlands II. Una consola portátil no tendría jamás que intentar fagocitar un videojuego de una consola de sobremesa, sino transformarlo en algo que se adaptara a ella; aunque quizás también el problema es el de la portátil que quiere jugar a ser consola grande.

 

Lo cierto es que tras la vida de la nueva portátil de Sony, si la comparamos con la de la PSP, da la impresión de que la industria no está preparada para esos desarrollos a medias, es decir de videojuegos que tienen que funcionar como portátiles pero verse como en sobremesa. Quizás es por culpa de ese no saber los juegos de PSVita lo que quieren ser por lo que se ha llevado un tortazo la máquina, como también se comieron un mojón los Assassin´s Creed que quisieron viajar a portátil, flojitos por no comprender las ventajas y necesidades de una portátil, distintas a las de una consola de sobremesa (sí, incluyendo el de Vita que bueno...)

 

Tengo muchas ganas de ver cómo evoluciona Pokemon con todos estos viajes a otras plataformas, mientras pienso en la próxima portátil que nos llegara, que deberá también saber comprenderse a ella misma como consola portatil. Y pobre PSVita, que ya ni se habla de ella ni para decir que no tiene juegos.

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