Blizzard pasa de Diablo MMO

La Blizzcon 2014 ha servido para ofrecer novedades de toda la línea de juegos de la empresa desarrolladora americana. Entre las novedades más importantes, una nueva expansión para HearthStone y otra para Starcraft II, pero no ha sido ni mucho menos lo único: El encargado del contenido de Diablo, Kevin Martens, charló con Kotaku en la Blizzcon 2014 y encaró uno de los temas más repetidos en los últimos años, el MMO de Diablo. Martens fue muy claro al respecto: "Nada que comentar sobre el MMO Diablo nunca más, fue una idea interesante cuando se abarcó, pero Diablo es una experiencia fuerte en sí misma".

 

Al final uno acaba preguntándose si realmente hace falta llevar a Diablo al campo del masivo. ¿Puede querer eso algún jugador? ¿Puede estar en la mente de un usuario normal de Diablo? Piensa que la actualidad de la franquicia es clave, y que no hay necesidad alguna para hacer un cambio importante: "Hemos aprendido a amar lo pequeño y centrarnos en la experiencia para cuatro jugadores. Muchos nos preguntan el motivo por el que no se puso a cinco jugadores, pero es que se construyó con cuatro en mente. La tentación de engrandecerlo pasó, y ahora disfrutamos de Diablo tal y como queremos disfrutarlo".

 

 

Martens opina que la fórmula sigue funcionando, de ahí que sea motivo de inspiración para estudios grandes y pequeños que toman los elementos de Diablo para llevarlos a sus propias experiencias: "Creo que la gente toma los elementos clásicos de Diablo y combina la formula con otras cosas, igual que ha sucedido con Destiny. Ha intentado llevar el conseguir objetos en un ambiente futurista y de disparos en primera persona. Es una forma interesante de hacerlo. Hacerlo más grande es una forma, pero también hay juegos como Rogue Legacy que prefieren apoyarse en la aleatoriedad".

 

Esa tendencia extraña de gigantismo que posee al videojuego a veces. Supongo que la oleada de rumores llegados de Project Titan ha debido influir para rescatar un asunto que parecía más que jubilado en las tierras de Blizzardlandia, pero no quita que en la empresa, que debe ser una de las más cuerdas de la actualidad en la industria, prefieran ser cautos a lanzarse a un territorio inhóspito en el que meter la pata a lo grande. Mirad lo de Diablo III, que comenzó flojeras, se le hizo un par de apaños y hoy es disfrutado por muchos de los que en su momento renegaron de él.

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