Assassin`s Creed podría ser una saga de lujo

Esta semana empieza la Gamescom de Colonia, cuatro días mal contados en los que las compañías volverán a sacar músculo, los triunfadores se darán un paseito para añadir contenido a lo que ya nos enamoró en Los Ángeles y los que se quedaron atrás en el E3 tratarán de recuperar parte del terrino perdido -¡Ánimo, Microsoft, tú puedes! ¡Ánimo, Nintendo, tú... eh... ¡Ánimo!!-.

 

Dentro de esta vorágine europea de hype y deseos reprimidos, Ubisoft se ha comprometido a estar presente con varios eventos y actividades entre las que, a falta de una conferencia propiamente dicha, han optado por poner varias versiones jugables de sus esperados títulos. Entre ellos se encontrará, como no podía ser menos, su nuevo capítulo de la saga de los tipos con capuchas y los notas del temple: Assassin's Creed Syndicate. ¿Valdrá la pena? Pues la cosa no pinta demasado bien, aunque habrá que esperar. 

 

 

Assassin's Creed podría ser una saga de sobresaliente

Y cuando digo 'una saga de sobresaliente' me refiero a una saga de sobresalientes merecidos, y no a esos 9 y 9,5 que le pintan algunas webs que en la misma parrilla de noticias lo ponen a cagar a pesar de la puntuación.

 

Y es que ya lo dije el otro día: Estoy jugando a Assassin's Creed IV: Black Flag y cada día que pasa me enamoro más del juego. Reconozco que lo estoy jugando más desde la perspectiva de Kenway el pirata que la de Kenway el asesino, pero al margen de filias y fobias, el juego está hecho por Ubi, es un Assassin's Creed y, ¡demonios! aún así está genial.

 

Vale, reconozco que lo primero que he hecho en cuanto he podido ha sido cazar un tiburón lamia y... una ballena jorobada, creo recordar, para confeccionarme el traje de ballenero y no tener que ver más esas horribles túnicas con capuchas que me parecen un mal chiste de la saga -sí, Guillemot, ¡Sorpresa! Estoy de las capuchas hasta la misma polla-. Pero descapuchando al pobre Kenway, y siendo sinceros con el título, Black Flag es un juego muy interesante. Es una pena que en Ubi no hayan descubierto cómo lo lograron con él. 

 

 

El secreto está en la historia

Y no, no me refiero al argumento sino a la historia como ese periodo documentado de la existencia humana que narra la evolución de las civilizaciones y demás pijaditas bélico-económico-socioculturales. Black Flag triunfa porque, a pesar de su argumento a lo Horatio Hornblower -permitidme el salto de Black Flag a postUnity en aras de la metáfora-, la historia de los piratas, de las colonias, de la esclavitud y los oportunistas está reflejada de forma 'fiel', jugable y muy pero que muy divertida. 

 

La situación del momento y el lugar está perfectamente reflejada, no sólo en su argumento, sino también en su jugabilidad, que es donde tienen que estar bien reflejadas las cosas en todos los videojuegos: Assassin's Creed IV Black Flag nos invita a ser piratas, y para ello nada mejor que ser un pirata y tener un navío propio que poder evolucionarlo de goleta a bergantín, a fragata y a navío de guerra. Para ello nada mejor que darnos un extenso mapeado plagado de islas, de recursos y de peces gordos que arpoenar. Para ello nada mejor que llenar los mares de galeones enemigos, de cantos marineros y de batallas navales a cañonazos y a gritos de 'a las jarcias'.

 

Y cuando ya somos los piratas más temidos de los siete mares, llega el momento de montar nuestra propia flota, descubrir nuevas rutas y enviar nuestros buques apresados a mercadear, proteger rutas marítimas y capturar materiales, cumplir misiones, desbloquear nuevas rutas y, en fin, disfrutar de una serie de minijuegos que poco o nada tienen que envidiar al clásico Taipan! 

 

 

Una saga que aún puede resucitar

Assassin's Creed ha sido una saga que ha sabido crecer para luego decaer, dar a luz esa pequeña joya que es Black Flag y luego volver a revolcarse en la ignominia de la vergüenza más absurda. Nació con Altair como un Prince of Persia para mayores que dio el pistoletazo de salida a algo que prometía. Ezio supo evolucionarlo con ese 'Let's Play Medici' que apuró al máximo con mil minijuegos que se adaptaron a su época y su contexto social...

 

...Y luego llegaron los spin-offs, los juegos sin sentido, los más de lo mismo y esa sensación de 'espera, pero a este he jugado ya, ¿no?'. Rakkenhakeeeton o como se escriba no aportó más que una túnica de Gandalf a la cabalgada del tipo de la campana, Kenway supo recuperar la dignidad y luego Unity y Rogue volvieron a sumirlo en el barro. 

 

Y sin embargo, Assassin's Creed es una saga que puede recuperar su gloria, siempre y cuando en Ubisoft se dejen de mierdas y reconozcan que lo que puede hacer grande de nuevo a los tipos de la capucha es dejarse de capuchas y jugar a recrear la historia. Habría sido intetresante que Unity nos hubiera permitido jugar un papel importante en la política del movimiento mediante un minijuego como Hijack! o un gestor de conquista de medios de producción. 

 

Mirando al futuro próximo, también habría que exigirle a Syndicate que contuviera elementos típicos del momento sociocultural que va a presentarnos, esa revolución industrial en la que las huelgas, los movimientos por los derechos humanos, la monarquía y la cultura literaria están en pleno apogeo. Ubisoft debería aprovechar todo esto para hacernos sentir en la historia con una serie deminijuegos que nos sirvieran para fundirnos con el entorno y olvidar esa estúpida capucha que se empeñan en ponernos sobre los hombros: Quiero un gestor de I+D con Tesla, un motor de trabajo social con Dickens, un montón de minijuegos con Sherlock, investigación cuántica con Wells y luchar por los derechos humanos en Whitechapel.

 

 

Finalmente, mirando al futuro lejano, habría que exigirle a Ubisoft un cambio en las políticas de Assassin's Creed. No sé si nadie se ha dado cuenta de que los tipos de la marca francesa tienen todos los elementos necesarios para hacer un Way of the Samurai en toda regla, un Tenchu como nos habría gustado que fuera desde el principio, un Sherlock Holmes a lo sandbox por el que matarían todos los Cumberbabosos e incluso un Assassin's Creed Nowadays que llevara la acción de los templarios al tiempo actual.

 

Pero para ello antes deben olvidar todo lo que saben de la saga. Empezar de cero con nuevas ideas con ese salto que todos esperábamos que iba a ser Unity y que al final no fue. ¿Serán capaces de lograrlo? Sin duda, aunque para ello antes tienen que quitarse la puta capucha de delante de los ojos.  

 

¡Nos leemos!

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