30 años de The Legend of Zelda
El primer The Legend of Zelda ha cumplido 30 años y todos tenemos que celebrar semejante hito. Aunque Mario sea la mascota más famosa de Nintendo, aunque mucha gente confunda a Link con Zelda y aunque la mayoría de jugadores solo hablen de Ocarina of Time como representante de la saga; lo cierto es que el mundo de los videojuegos no sería lo mismo sin esta impresionante saga de aventuras que se resiste a actualizarse en ciertos aspectos y que, quizá por eso, sigue siendo tan encantadora.
Seamos claros, los Zelda hacen lo que les da la gana y suelen salirse siempre con la suya. ¿Actores de doblaje en los videojuegos? "Jaja, me río en tu cara", dijo Eiji Aonuma en una ocasión. ¿Que hay que comprarse una nueva consola con un nuevo sistema de control para jugar a un Zelda? Se hace. ¿Que hay que soplar a la consola para resolver un puzle? También. ¿Que hay que comprar un Expansion Pak? Menudo problema. ¿Y qué pasa si ese juego prometido para Wii U termina saltando a NX? Jejejejeje...
Puede que Nintendo haya utilizado esta franquicia tan querida con algo de mala lechuga en alguna ocasión, pero siempre han sido sinónimo de alguna clase de renovación: la arquitectura de niveles de A Link to the Past, las historias unidas de los secundarios de Link's Awakening; la música de Ocarina of Time; el timpo en Majora's Mask; lo multijugador en GBA; etcétera, etcétera. Por alguna razón, a Nintendo nunca le asustó probar cosas nuevas con esta saga porque sus principios, al final, son constantes.
Al margen de que nos dediquemos a salvar princesas una y otra vez, algo que parece ir cambiando poco a poco; la exploración de mazmorras, el uso inteligente de objetos, la exploración de mundos llenos de personajes pintorescos; y la eterna lucha del bien y el mal están siempre presentes por encima de cualquier otro aspecto. Es como si The Legend of Zelda fuera ese cuento que una y otra vez se va contando cada generación y que muta a medida que los abuelos se lo cuentan a sus nietos, y luego estos a los suyos. A nivel jugable, casi pasa eso mismo también: la base es similar, los detalles van evolucionando.
Quizá esto sea un problema para embarcarse hacia los próximos 30 años, por supuesto. Los Zelda más recientes, aun siendo excelentes, no son tan frescos como en el pasado. Por eso parece que el nuevo de Wii U o NX va a ser un cambio importante en los planteamientos de la saga, y aunque no nos hayamos parado a pensarlo, el tema del mundo abierto podría ser realmente algo gordo si eso significa abandonar todo lo que comento arriba.
También sería muy gordo que héroe y heroína trabajaran mano a mano, como muchas veces he leído a los fans teorizar sobre este nuevo juego; pero a saber qué intentan hacer con este nuevo juego. Lo que tengo claro es eso mismo que pongo más arriba: Nintendo hace lo que quiere con Zelda e innova siempre un poquito sobre una base sólida. Si ahora también va a cambiar esa base, pues vamos a tener algo gordo con lo que celebrar estos 30 años.
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