1. Mundogamers
  2. Avances
  3. 3DS

Avance The Legend of Zelda: Ocarina of Time 3DS

Domingo 23 de Enero de 2011 por Alejandro Pascual


De un remake puedes esperar, como mínimo, que guarde los mismos factores que hicieron grande a la obra copiada. Pero Nintendo tenía una nueva responsabilidad, no sólo por crear una nueva versión de uno de los juegos y el Zelda más querido de todos los tiempos, sino por convertirlo a su nueva joya de la corona: Nintendo 3DS.

Para ser un trabajo tan importante, lo cierto es que poco se ha sabido de él hasta que no hemos podido probarlo in situ. Y Ocarina of Time Remake es exactamente lo que esperábamos, y más, mucho más. Principalmente, porque, de nuevo, Nintendo se ha concentrado en dar ejemplo a todos los estudios de cómo puede realizarse un juego con una producción de calidad y de sobremesa en una portátil, esquivando todos los problemas o limitaciones que pueden ocurrir al trasladar, sobre todo, el control.

Ocarina of Time Remake se controla casi mejor que su versión original. No sólo su factura técnica está más pulida, pero respetando absolutamente todos los escenarios que el aficionado recuerda con nostalgia, sino que ha aprovechado las capacidades técnicas de la nueva consola en algo más que añadir el efecto 3D estereoscópico que lleva por bandera.

La pantalla táctil es ahora un cajón de sastre donde todas las opciones están perfectamente implementadas, tanto, que casi uno desea que pudiéramos pulsarlas con el dedo como si fuera un dispositivo de Apple en vez de tener que hacer uso del stylus. La cámara sigue realizando su función correctamente, y algunas opciones extra, como el caso del tirachinas, por ejemplo, son tan sorprendentes que no nos extrañaría que se convirtieran en un estándar a la hora de llevar juegos de disparos a la nueva consola de Nintendo.

Para apuntar con el tirachinas, uno puede, tras pulsar el botón Y, dirigir la mira con el stick, hasta que el jugador mueve un poco los brazos para acomodarse, y se da cuenta de que la mirilla se ha movido sola. El giroscopio que posee la consola realiza su función y uno se da cuenta de que puede moverse, incluso realizando giros hacia el cielo o de 180 grados para apuntar con precisión a cualquier esquina del escenario. Es una sorpresa que quita incluso protagonismo a la función 3D de la consola.

En cuanto al 3D, puede que Zelda no sea el juego que más aproveche esta característica. Suponemos que el hecho de tener que llevar un patrón fijo realizado hace quince años no permite mucha libertad a los diseñadores para crear escenas que ofrezcan un espectáculo estereoscópico tan impresionante como otros cuyo desarrollo esté especialmente diseñado para ello. En este punto, vaticinamos también que empezaremos a ver a lo largo de la vida de la consola qué estudios tienen esto en cuenta y cuáles simplemente dan a un botón para generar sensación de distancia.

Aun con todo, la palabra remake puede llegar a quedarse demasiado grande, si tenemos en cuenta todas las adaptaciones que ha tenido el título hasta la fecha, y es que cuando uno se enfrenta a una nueva versión de un juego tantos años después, debe esperar que, aunque se mantenga la fidelidad al título original, se hayan aplicado las técnicas de nuestros tiempos para, por ejemplo, rellenar todos esos espacios vacíos, crear nuevas atmósferas llenas de detalles e incluso ir un poco más allá y añadir mapas o personajes nuevos. Por tanto, The Legend of Zelda Ocarina of Time Remake casi puede tratarse más de una edición remasterizada, casi como las ediciones que tan de moda se están poniendo últimamente en PS3 lanzando juegos de PS3 en HD. Aquí, lo que más se ha remakeado es el control y la inclusión del 3D estereoscópico.

Lo más importante de todo, y eso es lo que Nintendo debía tener en la cabeza cuando creó este título, es que todos tengan la oportunidad de jugar de nuevo a este clásico. Los aficionados tendrán una nueva excusa para rememorar sus paseos por Hyrule y para los neófitos puede ser una buena excusa para, esta vez sí, probar ese juego que se descargaron en la Consola Virtual, que lamentablemente no envejece tan bien como otros clásicos de siempre, y del que seguían sin entender por qué tantas hordas de fans lo encumbraban como el mejor juego de todos los tiempos. Como mínimo, es el Super Mario 64 DS de la nueva portátil de Nintendo. Un ejemplo de cómo se deben hacer las cosas en 3DS para los demás desarrolladores. Así que no hay excusa que valga.

Ficha técnica


Salida: Por confirmar

The

The

The

The

The

The

The

The


<< Anterior Siguiente >>