Avance Metal Gear Solid V The Phantom Pain ,PC,PS3,PS4,X360,XONE
Comentaba en uno de los artículos de la web que Metal Gear Solid V The Phantom Pain va a ser como Peace Walker, pero a lo loco. Y quizás sea la mejor descripción posible, por su simpleza y por el significado que seguro que extraen los fans de la franquicia que pudieron disfrutar de esa pequeña joya que visitó PSP hace unos añitos (aunque también lo hemos podido disfrutar en posteriores reediciones).
Metal Gear Solid 4 destacaba, sobre todo, en su aspecto narrativo y argumental. De hecho, prácticamente todo el juego estaba enfocado en la historia y en las secuencias cinemáticas, generando la sensación de que las partes jugables casi eran simples complementos. La meta de Hideo Kojima con aquel Guns of the Patriots era evidente: terminar de contar toda la historia y cerrar todos los cabos sueltos que la historia de Solid Snake había dejado por el camino durante todos los títulos aparecidos en el mercado hasta el momento.
Con la quinta entrega la cosa cambia totalmente: ya no hay tanta necesidad por contar. Sí que habrá una trama, sí que Kojima y su equipo volverán a regalarnos un guión que seguramente será excepcional y volverá a revolucionar las maneras de contar y narrar dentro de la industria de los videojuegos, pero no hay tanta presión por cerrar unos arcos que directamente no existen. Ahora cuentan con una libertad creativa que parece que les ha llevado a potenciar el aspecto jugable por encima del narrativo, haciendo sentir que la meta es ofrecernos un Metal Gear con el que los fans puedan estar horas y horas disfrutando sin parar.
Y es el momento de volver a Metal Gear Solid Peace Walker. Aquel título portátil, además de contarnos una historia que finalmente comprobamos que tendrá mucho peso en The Phantom Pain, también poseía ese componente de gestión que convertía al título en una experiencia casi infinita para todo aquel que deseara que lo fuera. El título nos permitía gestionar nuestra Mother Base y nuestro ejército a nuestra manera, reclutando soldados durante las misiones y asignándolos a distintos puestos. Con esto conseguíamos ser cada vez más poderosos, con más posibilidades para desarrollar nuevo armamento y nuevos dispositivos tecnológicos que tenían un uso real dentro de las misiones del juego.
Ese mismo concepto es el que se va a extrapolar a Metal Gear Solid V The Phantom Pain, pero potenciado y evolucionado hasta unos niveles que podrían provocarnos auténtica locura. Ahora también podremos gestionar nuestra Mother Base y nuestro ejército, también podremos realizar las misiones secundarias controlando a otros personajes que no sean Snake, eligiendo a los compañeros que nos ayudarán durante la misión, con habilidades y características únicas para cada uno de ellos... las posibilidades que nos brinda este título son auténticamente impresionantes a todos los niveles.
Porque Metal Gear Solid V The Phantom Pain no será una historia lineal, aunque tampoco será un juego de mundo abierto como tal. Sí que tendremos total libertad para hacer lo que queramos en cualquier momento: seguir con la historia principal, dedicarnos a realizar objetivos secundarios, ir a un mapa a reclutar soldados, investigar una localización en la que parece que se encuentran unos archivos que podremos usar para mejorar nuestra tecnología... y todo ello, al igual que Peace Walker, se irá desarrollando sobre la marcha de una forma dinámica.
Una vez entremos en el campo de batalla (eligiendo previamente con total libertad nuestro equipamiento, nuestros acompañantes y demás aspectos) nos encontraremos con vastos terrenos abiertos. No es que el mundo sea enorme y esté interconectado, sino que habrá diferentes zonas muy diferenciadas de una gran extensión de terreno, donde evidentemente habrá hueco para todo tipo de distintas misiones. Si habéis jugado a Ground Zeroes, el prólogo del juego, os podréis hacer una idea general: un mismo escenario da pie a que se puedan realizar distintas misiones de muy diferente planteamiento.
Clima dinámico que puede cambiar nuestros planes de un momento a otro, soldados situados en distintas zonas de los escenarios dependiendo del horario en que decidamos realizar la misión, y otras muchas variables conformarán una aventura que puede dar para muchísimas horas para todo aquel que sepa disfrutarlo. Como he dicho al principio, decir que The Phantom Pain va a ser como Peace Walker pero potenciado a todos los niveles es la mejor descripción que puede hacerse sobre el juego.
Todavía es pronto para sacar conclusiones mayores, por supuesto. Pero es innegable que esta quinta entrega de la saga puede poner el broche final a una franquicia mítica, en una entrega que no puede pintar mejor en todos los sentidos que hasta ahora se nos han mostrado. Ahora solamente queda la misión más difícil: esperar al 1 de septiembre. Tú eliges cómo vas a enfrentarte a ella, porque a nosotros nos va a costar mucho.
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