Los mejores juegos del año, según Kysucuac

Antes de comenzar con los juegos que cito por aquí, voy a explicar un poco por qué son estos y no otros, o por qué incluyo juegos que ni siquiera son de este año. Para mí, un Game of the Year no es simplemente aquel que se ha lanzado en el año en cuestión, sino aquellos también que han tenido su repercusión en la industria o en parte de ella durante ese periodo de tiempo. Por esa regla de tres, podría incluir a League of Legends en esta lista, dado que sigue siendo el título más jugado del mundo y con un mayor alcance internacional en lo que a competiciones se refiere. Peeero al LoL ya lo tengo muy masticado y os hablo demasiado de él, por lo que vamos a pasarlo por alto esta vez.

Por supuesto, hay otros muchos que podría incluir, como Mortal Kombat X o Tomb Raider. Hasta Mad Max podría haberse visto incluido en mi lista de los GOTY. No obstante, quizás me he decantado por estos diez elegidos por todo lo que he visto en las redes sociales, más que por cómo es un juego en sí o cómo me ha parecido a mí en particular. No te preocupes, Max, sigues en la lista de mi corazón. Y en la carta a los Reyes Magos. En fin, comencemos.

El MOBA regresó a su hogar. Como todos sabemos (bueno, puede que todos no, pero si alguien me ha leído alguna vez ya está enterado), el género del Multiplayer Online Battle Arena nació gracias a Warcraft III, primero como un mod, y luego adoptando la forma de un juego totalmente nuevo: Dota. La noticia de que Blizzard iba a sacar un juego de un género que se creó, precisamente, gracias a un título suyo tuvo una gran acogida, si bien Heroes of the Storm, a pesar de haber encontrado su público, no ha conseguido llamar demasiado la atención.

Blizzard nos trajo un MOBA mucho más sencillo. Si League of Legends es el Dota para dummies (y ojo, que juego a los dos), podríamos decir que el Heroes es el League of Legends para dummies. Eso no quiere decir que el juego sea fácil de dominar, sino que, simplemente, sus mecánicas son mucho más sencillas porque, en fin, no tenemos objetos que comprar y todo eso. Heroes of the Storm ha sido un juego destacable este año, sobre todo desde que salió este verano, y la posibilidad de jugar en un MOBA con cualquier personaje del universo Blizzard es muy atractiva. Si aún no lo has probado, no sé a qué estás esperando. ¡Es gratis!

Bueno, vale, me has pillado. CSGO no es un juego de este año, ni del año pasado, pero debido a su importante subidón de este año 2015 se ha merecido estar en mi lista de los GOTY. Como analista de eSports he podido observar la montaña rusa en la que se ha convertido este juego desde muy cerca. Counter Strike estaba de capa caída – aunque tampoco exageremos, que siempre ha tenido sus comunidades y jugadores fieles – en los últimos meses, hasta que llegó la IEM de Katowice, donde la ESL consiguió darle un gran empujón al shooter. Del 12 al 15 de marzo, Counter Strike batía el récord de audiencia con más de un millón de espectadores, sumando físicamente y por streaming. Una cifra muy significativa para este juego y que ha marcado un antes y un después en este 2015.

Y ya que estamos hablando de deportes electrónicos, termino de hablar de este tema con Rocket League, la gran revelación del año en lo que a videojuegos de competición deportiva se refiere. Juegos de fútbol hay muchos, por no hablar de títulos de coches... ¡Pero a nadie se le había ocurrido juntarlos en uno solo! El resultado ha sido un juego divertidísimo que ha encontrado rápidamente su hueco entre los eSports.

Cuando un juego es bueno, te atrae aunque los componentes que lo forman no lo hicieran por separado. Y Rocket League es muy bueno, algo de lo que también se han dado cuenta en las marcas de deportes electrónicos, como son la ESL y la Liga de Videojuegos Profesional, y en la propia PS Plus, que ya lo tienen como ojito derecho de la competición.

Cambiamos de tercio con Super Mario Maker, un título que al principio no me convencía demasiado pero que me ha ido gustando más con cada cosa nueva que nos enseñaban desde Nintendo. Poner en las manos de los fans una potencia creadora como la de Super Mario Maker ha dado lugar a niveles de todo tipo, desde los más fáciles hasta los infernales. Aunque la fiebre por este juego ha decaído un poco – al menos, ya no se habla demasiado por las redes sociales, aunque está claro que la gente va a seguir creando y jugando los diferentes niveles de la comunidad – últimamente, sigue siendo una muy buena herramienta de entretenimiento. Tanto si eres de los que quieren crear sus propias fases como si eres más de los que prefieren que se lo den todo hecho, éste es un juegaco. Y mejor no hablamos del nivel de Waluigi.

Escalofriante, ¿verdad?

Seguimos hablando de Nintendo porque este año 2015 nos han regalado (bueno, lo de regalado es sólo una forma de hablar con esto de que estamos en Navidad, que está difícil la cosa ya a la hora de bajar precios, como para que encima nos regalen algo) joyitas muy buenas. Una joyaza, hasta manchada de tinta de calamar, es Splatoon. Este shooter en tercera persona está orientado al modo multijugador desde que salió, lo que lo convierte en otra gran marca para los eSports (sí, ha sido un gran año para nosotros), pero deja un poco triste a los que no se centran tanto en esa visión competitiva. Porque, más importante que Splatoon, son todos los extras que se le han ido añadiendo con el paso del tiempo.

Splatoon es todo un desafío de mecánicas y plataformas cada una mejor que la anterior, y Nintendo ha sabido sacar, después de tantos años, una nueva marca en forma de personaje. ¡Y vaya personajes! Los Inkling son adorables a más no poder y la gente se ha vuelto loca con ellos. No sólo con el juego, sino con sus correspondientes amiibos. Ay, qué nos gusta el consumismo.

Muchos de nosotros no hemos vivido Until Dawn en primera persona, pero no nos ha hecho falta. Cuando esta película de terror interactiva vio la luz en PlayStation 4, muchos corrimos a Youtube, donde una gran cantidad de jugadores quiso compartir con nosotros su juego de la mejor forma posible: Convirtiendo Until Dawn en una serie. En mi casa era imposible estar, ya que a mi compañero de piso hubo una época en la que no se le podía hablar de otra cosa que no fuera Until Dawn. Supermassive Games ha creado una historia increíble con personajes sencillos: ocho amigos que quieren honrar la desaparición de las dos hermanas de uno de ellos. Por supuesto, como cualquier otra película de terror, la cosa sale mal. Muy mal.

La idea de Until Dawn es sencilla, con un guión no demasiado destacable y unos personajes simples. ¿Es en esa sencillez donde encontramos la clave de su éxito? Nah, probablemente sea en las muertes gratuitas que hay a lo largo de todo el juego. ¿Qué? Eso no cuenta como spoiler.

Un juego donde haya un perro, un gato, un canario, un animal en general y no muera, es un juego que me merece la pena y mucho. Sobre todo, porque si sé que Albóndiga está ahí de manera inmortal y no le va a pasar nada malo, no voy a sufrir. No como con cierta película de Will Smith de la que no voy a hablar por si acaso alguno todavía no la he visto.

Pero ese adorable pastor alemán que nos acompaña en esta postapocalíptica aventura no es lo único que llama la atención en Fallout 4. Los escenarios, la ambientación y cada pequeño detalle de este mundo destruido merecen nuestro tiempo. No podía esperarse menos de Bethesda, por supuesto, que además se ha marcado un más que sobresaliente creador de personajes, algo que siempre ha sido algo más flojucho en sus juegos (ay, mis elfos del Oblivion. Ay).

Ya lo dije cuando incluí este juego en mi lista de videojuegos para Halloween. “De los retorcidos creadores de Dark Souls llega algo todavía más retorcido”. Y no sólo por su mayor dificultad. Bloodborne cuenta con una ambientación exquisita; pero no exquisita porque se trate de una visión agradable. Ni mucho menos. La ciudad ficticia de Yharnam es el escenario perfecto para representar la más completa y elegante fechoría, el lugar que hubiera inspirado a Lovecraft y a cualquiera que quisiera crear una obra de terror.

Bloodborne se merece más que un sitio en la lista de los GOTY y al cazador que representamos bien le podrían hacer una estatua. Diferentes armas, diferentes modos de luchar y de sobrevivir y diferentes enemigos, desde los más normales hasta horribles criaturas que nos van a hacer la vida imposible. En la variedad está el gusto, aunque aquí, a pesar de ella, todo sea lúgubre y oscuro. Y eso mola.

Ay, que sí, que vuelvo a hacer trampa. Overwatch no cuenta como GOTY para 2015, pero sólo de manera oficial. Ésta es mi lista y hago con ella lo que me sale del sobaco. En realidad he querido incluirlo porque este año ha estado llenito de Overwatch desde el E3, y eso que ya se habló de él con antelación. Este shooter/MOBA fue una sorpresa porque era la primera vez en mucho tiempo que Blizzard se salía de lo habitual y creaba un universo totalmente nuevo, con personajes de todo tipo pero que nada tenían que ver con sus mundos ya creados y recopilados en Heroes of the Storm. Que Tracer o alguno de sus compañeros vayan a salir en el Heroes ya es otra cosa.

Overwatch es mi juego más esperado del año, por mucho que me haya quedado sin Beta y el señor Boss Junquera no pueda darme la suya. He tenido la oportunidad de catarlo ligeramente, lo justo para poder hacer un avance, y, joer, esto es demasiado pa' mi body. La gran variedad de personajes, con un número más elevado que Heroes of the Storm y sólo en su fase beta, la riqueza de los mapas, sus gráficos y la importancia de la estrategia han hecho de Overwatch un título muy completo y con mucho potencial a nivel competitivo. El problema, que no vaya a ser free to play como se esperaba.

Bueno, ¿cómo no elegir a The Witcher 3 como Game of the Year? Y no, no he recibido ningún tipo de sobre por parte de la organización de los Game Awards. Desde luego, no le doy el primer puesto a The Witcher 3: Wild Hunt únicamente como juego, sino también como fenómeno de masas. Y es que desde su lanzamiento, allá por mayo, hasta la fecha en la que nos encontramos, las redes sociales y los medios especializados en videojuegos no han callado. Cada día podríamos sacar algo nuevo de la historia de Geralt de Rivia en este tercer juego, más profundo para aquellos que hayan leído los libros.

Pero no te hace falta haber leído absolutamente nada de Sapkowski para saber apreciar la obra de arte que supone este juego y sus antecesores (si bien soy incapaz de soportar el sistema de combate del primero). Hasta con solo verlo, sin jugar, se es capaz de disfrutar y adentrarse en el universo que esconde este videojuego de rol. Cada detalle que conforma este mundo abierto con atardeceres que a veces superan la realidad es digno de contemplar, y el haber adaptado todas sus mecánicas a jugadores ya expertos y a aquellos más novatos es otro punto a su favor. Para mí, Geralt tiene más que merecido su GOTY.

Por supuesto, no olvidemos que esta lista no es más que mi humilde opinión, y que todos sois libres de discrepar. Yo luego soy libre de morderos la yugular como respuesta ante vuestra herejía. Es broma, es broma. ¿Y vosotros? ¿Cuáles son vuestros juegos del año? Y lo que es más importante de cara a la carta de los Reyes Magos, ¿habéis sido buenos?