E3 2016 - Crónica de la conferencia de Ubisoft
No, no hemos tenido Beyond Good & Evil 2. Seguramente se convertirá en el nuevo The Last Guardian y cuando Half-Life 3 esté listo, Sony juntará el de Valve, el de Ubisoft y el nuevo Red Dead de Valve para volver a un trío de ensueño, pero por el momento, nos quedamos con lo que ha mostrado Ubisoft en el E3 2016.
Ubisoft ha celebrado con sus seguidores 30 años de historia en los videojuegos, y lo ha hecho con una conferencia poco convencional para lo que nos tienen acostumbrados. Para empezar, los momentos 'ridículos' fueron escasos y directamente se quitaron de delante a Just Dance nada más empezar, y al menos lo hicieron con Queen en los altavoces, que siempre ayuda a hacer mejor las cosas. Y salvo una especie de batalla de MCs con una intención bien clara, el momento de las películas y el momento de los experimentos con la realidad virtual (una carrera de águilas o una experiencia multijugador para pilotar la Enterprise), todo ha ido a pedir de boca, y no necesariamente hemos de desconfiar de lo mostrado esta vez.
Todos y cada uno de los anuncios de esta noche han ido acompañados de largas demostraciones de juego real, una realidad en la que por supuesto podría caber algún ya mítico downgrade, pero todo lo visto sonaba de lo más creíble, aunque haya alguna parte orquestada de más. Y todos los anuncios, eso sí, con fecha de lanzamiento.
Y es curioso, porque sólo dos de los cinco anuncios grandes entrarían dentro de esa categoría de juegos que nada más verlos uno piensa que son 'muy Ubisoft', y aún así, han sabido dejar un buen regusto con ellos. Me refiero sobre todo a Ghost Recon Wildlands y Watch Dogs 2, los dos nuevos sandbox de Ubisoft, cada uno con una tónica y temática bien diferente, y no sólo entre ellos, sino bien diferente también a lo visto en anteriores entregas de sus respectivas sagas.
Ghost Recon Wildlands es una historia de operativas militares en un entorno de moda como es el de los líos con un cártel de la droga (boliviano en este caso) que podemos tener recientes de series como Breaking Bad y Narcos, sólo que aquí se busca una interacción y coordinación entre varios jugadores (habrá que ver lo divertido que puede llegar a ser siendo uno sólo), que es como siempre se ha disfrutado más de Ghost Recon, pero esta vez para realizar misiones de infiltración y extracción en un mundo abierto. Y la demo parecía más coreografiada de la cuenta en según qué puntos, sobre todo viendo detalles como que uno de los jugadores se bajase de una moto en marcha y ésta se arrastrase por debajo de un coche en mitad de un derrape. Pero llegará en marzo.
El otro de los juegos coreografiados era uno de los que se esperaban, Watch Dogs 2, en cuya demo gameplay todo parecía colocado a las mil maravillas para que la misión se resolviese de la forma más espectacular posible y se luciesen las animaciones de un protagonista desgarbado, alguien que no parece, como suelen parecer los protagonistas de todo sandbox, un cualquiera con un entrenamiento militar avanzadísimo. Todo estaba muy bien colocadito para ser hackeado y activado (siguiendo con la premisa de hackear todo tipo de objetos pulsando un botón en un móvil), pero al menos se vio mucha variedad de acciones que no parecían tan scripteadas al 100% como los accidentes de tráfico del primero.
Watch Dogs 2 acierta también con el cambio de tono, mucho más Mr Robot que Person of Interest, juvenil, swagger, despreocupado, activista con una intención,... También suena a acierto ver que Ubisoft se ha olvidado de las venganzas random en toda una conferencia, y la verdad, se agradece. Sería toda una sorpresa que Watch Dogs 2 fuese a Watch Dogs lo que la aventura de Ezio supuso para la de Altaïr en Assassin's Creed y que realmente llegase a ser más que una idea original, pero tal vez sea mucho confiar.
Y entre una nueva expansión de The Division, un nuevo Trials en una mezcla loca con la estética de Far Cry Blood Dragon que ya está a la venta y una versión ampliada del majísimo Grow Home que pasa a ser Grow Up, hubo tiempo para mostrar en profundidad, como está bien mostrar las cosas, tres de los juegos que se han convertido en serios candidatos a mejores juegos de la feria.
South Park: The Fractured but Whole (a ver cómo lo traducen aquí) tuvo una presentación por todo lo alto en la que nos mostraron varios fragmentos de juego, desde exploración y diálogo hasta el combate o la historia, y todo es absolutamente desternillante. Además, no se han conformado con hacer un juego más con otra historia, lo han hecho mucho más a lo grande y han convertido el sistema de combate de un RPG clásico en un RPG táctico, con posicionamiento de unidades, cuadrícula y todo. Y Cartman y compañía quieren crear su propia saga cinematográfica de superhéroes con intrincadas tramas, crossovers e incluso series en Netflix, como Marvel. Apunta a ser mucho más que un juego gracioso, y además la compra de South Park: The Fractured but Whole incluye gratis la versión para la plataforma correspondiente de South Park: La Vara de la Verdad. Nada de versión original retrocompatible o limitación de plataformas, no. Así se hacen bien las cosas.
Tan bien como están haciendo con For Honor. El mismo año pasado me parecía uno de los juegos más sorprendentes de la feria siendo sólo algo conceptual (sólo se podía probar un modo multijugador) pero esta vez ya es algo más grande, ya apunta a ser un videojuego de verdad, con una campaña que enfrenta a vikingos, templarios y samurais entre sí y contra el ejército de una diosa oscura, todo con un sistema de combate muy bueno que además servirá para unos duelos en multijugador bien memorables. Y además del gameplay y los detalles de su lanzamiento, enseñaron también un tráiler cinematográfico muy, muy espectacular.
Y no, no cerraron la conferencia ni con Watch Dogs 2, ni con Assassin's Creed, ni con Beyond Good & Evil 2 (ay), sino que la cerraron con una nueva propuesta bien interesante, Steep, un juego que mezcla varios deportes de nieve y montaña con la propia idea turística de visitar, recorrer y descender los picos de los Alpes, solos o en compañía, buscando crear rutas o compartir momentos concretos en una red social de juego aún por dar forma, pero que pinta muy bien.
El ritmo no era el esperado, 15 minutos para cada juego con algunos altibajos de por medio no es algo habitual en este tipo de conferencias en las que abundan más la palabrería del marketing y los tráilers escuetos. Podrá gustar más o menos la línea de títulos presentada por Ubisoft esta noche, pero lo que es indiscutible es que han hecho las cosas muy, muy bien. Esperemos que lo consigan mantener.
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