Analisis Phoenix Wright: Ace Attorney - Spirit of Justice ,3DS

La saga Phoenix Wright es una de mis favoritas, y una de las pocas que se atreve a hacer evolucionar el género de las visual novels. Con ya quince años a sus espaldas, spin offs, una trama que trasciende de lo legal para tocar el plano espiritual, diversos protagonistas que cruzan sus caminos con nuestro querido abogado para enriquecer y ramificar la historia, cualquiera podría pensar que la saga está ya agotada, pero es todo lo contrario. Phoenix Wright: Spirit of Justice reúne todo lo bueno conocido, lo mezcla y le añade cosas nuevas. El resultado es una experiencia fascinante. Sin embargo, y haciendo honor a la verdad, Phoenix Wright: Spirit of Justice no se molesta en corregir defectos propios de la serie que se repiten capítulo a capítulo.

Phoenix Wright viaja en este ocasión a una tierra lejana de inspiración china, en ella, los juicios tienen un peculiar matiz: si el acusado es condenado, también lo es el abogado defensor. Phoenix se desplaza hasta Khura'in para encontrarse con Maya, pero antes de hacerlo acaba inmerso en un oscuro y complejo caso de asesinato. No estará solo en su aventura, pues también aparecerán la espiritista y sus colegas Apollo y Athena, cada uno con su particular propuesta shonen para descubrir quién es el culpable de cada caso.

Llega una novedad a la saga: poder ver en diferido, y a través de los ojos del asesinado, lo último que sus ojos han captado. Khura'in es una tierra de mediums capaces de contactar con el otro lado, una habilidad que llega a los juicios para que Phoenix Wright y los suyos sigan encontrando incongruencias en ellos. Estas visiones de muerte casan de maravilla con el motor gráfico que conocemos de Dual Destinies y remozado para la ocasión. Una de las cosas que más han favorecido el ritmo y la calidad de la serie es dejar atrás las escenas estáticas y contar su relato con modelados con volumen, expresivos y animados. En Phoenix Wright: Spirit of Justice este motor no solo sirve para mejorar el aspecto del juego, también para convertirse en las pruebas de un juicio.

Este añadido se mezcla con el resto de adiciones jugables que la saga ha ido incorporando desde sus inicios, que han llegado con cada nuevo personaje como seña de su identidad y que han sabido enriquecer capítulo tras capítulo el juego de Capcom. Phoenix Wright: Spirit of Justice tiene en la variedad de sus planteamientos su mayor baza, también en una trama rica, divertida y con giros argumentales que reúne a muchas caras conocidas. Sin embargo, también arrastra los problemas habituales de la saga.

El juego llega en inglés y solo en formato descargable. Pese a que los juicios son pura variedad y ello aporta un ritmo excelente al juego, las conversaciones tienden a alargarse demasiado en ocasiones, a añadir demasiada paja a la chicha auténtica de su trama y a no ir al grano cuando debería. El problema que esto acarrea es que nos distraerán de las pruebas verdaderas a las que sí tenemos que prestar atención. En ocasiones creeremos que una prueba es fundamental para un caso, que resulta obvio que es la clave de su resolución, pero no. Contrasta lo parcial que son las evidencias, las imágenes que vemos o la información de los vídeos con la cantidad de texto innecesario que a veces nos hace leer el juego. Querremos ir al grano, al juicio, a esa resolución definitiva que se alarga o sobre la que el juego da a veces vuelvas sin sentido para llevarnos en otra dirección por la que no queremos ir. Y en esas ocasiones, en unas que se repiten entrega tras entrega desde el primero de la saga, es cuando Phoenix Wright: Spirit of Justice muestra su peor cara.

Este mal se acentúa con la linealidad, artificialmente forzada en ocasiones, a la hora de señalar qué prueba es la adecuada para cada cuestión particular. A veces recibimos tanta información que querríamos llevar el juicio en otro sentido, pero no podemos, teniendo que acertar con cómo desea este desarrollarse. En otras ocasiones nos parecerá que la lógica no es la que impera en la sala, con imágenes que contienen pruebas y que creerás que se contradicen con textos que puedes leer describiendo la situación retratada; por fortuna, estas son las menos.

Phoenix Wright: Spirt of Justice, pese a esto último, es de los Phoenix Wright que más me ha gustado. Es uno de los que tienen un tono más desenfadado, que controla mejor su ritmo de juego pese a siguen existiendo secciones que sobran, con un gran despliegue de propuestas jugables condensadas en un mismo cartucho y con un apartado técnico solvente y convincente. Si llegas nuevo a la saga, es también una buena manera de iniciarse, el título aporta pistas si las necesitas, te deja guardar la partida cuando quieras y cuenta con tutoriales para explicarte cómo funcionan los psicocandados de Maya, por ejemplo, en caso de que no sepas de qué va la cosa. Phoenix Wright: Spirit of Justice es un título muy recomendado y de lo mejorcito que tiene la Nintendo 3DS, pero eso no quita que le tengamos que tirar de las orejas a Capcom por traerlo en inglés, por seguir abusando de unos juicios en los que hay que recurrir al ensayo y error para acertar y de unas charlas a veces excesivamente largas e innecesarias.