Analisis Monster Hunter Stories 3DS

Monster Hunter Stories es el Pokémon de Capcom, eso no se le escapa a nadie, tampoco que su objetivo es atraer a las audiencias más jóvenes a esta franquicia. La cuestión ahora es saber si cumple también con los que amamos esta serie desde sus inicios, es decir, ¿sabe ser Monster Hunter Stories algo más que un juego de rol-recolecta-bichos del montón? Pues sí que sabe, sí.

Monster Hunter Stories es una notable aventura que exprime el potencial técnico de la portátil de Nintendo. El título de Capcom ofrece modelados sólidos y detallados, entornos hermosos y lo anima todo muy bien. Casi hasta consigue que te creas que estás jugando a un juego de mundo abierto de verdad, lo que complementa con una BSO muy lograda, una trama entretenida y unos combates más profundos de lo que parecen a simple vista.

Todo comienza en una apacible villa de ¿cazadores? No, de riders. En Monster Hunter Stories cambia el cuento típico de la saga. Aquí encarnamos al habitante de un pueblo que se hace amigo de los monstruos en lugar de matarlos, los monta y estos le acompañan al combate por propia voluntad. Esto choca con la manera de vivir del resto del mundo que visitaremos más adelante, pues los cazadores solo conciben a estas criaturas como presas.

Esta tensión en la manera de comprender a los animales es la base de la trama de Monster Hunter Stories, tanto a nivel global como local. Al empezar el juego se nos presentan a los amigos del héroe. Para resumir este punto y que lo comprendas en un santiamén: tú encarnas a Naruto y tus amigos son Sasuke y Sakura. A tu amigo le ocurre algo terrible, lo que le acaba empujando a emprender un viaje oscuro y siniestro en busca de poder. A tu amiga le da por la investigación, sumándose a un escuadrón dedicado a ello y abandonando la aldea. Tú, por tu parte, decides salir al mundo exterior para conocerlo, volverte más fuerte y descubrir el origen de una misteriosa plaga negra que transforma a los monstruos en seres violentos.

La trama de Monster Hunter Stories gira siempre alrededor de argumentos, encuentros, batallas e hitos que nos recordarán a otras tantas ya vistas en el anime. Esto no es algo negativo, porque lo cierto es que funciona muy bien, es entretenida y consigue mantener la tensión hasta el final gracias a convertirse en algo personal. Sentirás que estás pasando las páginas de un shonen, solo que jugándolo en el universo Monster Hunter.

Esta historia, sencilla pero efectiva, gana mucho encanto gracias a lo tremendamente coloridos que son los escenarios y parajes que recorremos. Monster Hunter Stories hace unos esfuerzos tremendos por permitirnos disfrutar de un viaje diferenciado y rico. Las entregas canon nos entregaron un mundo con volcanes, con zonas heladas, con pantanos, desiertos y junglas, todo eso está aquí para que lo recorramos con los monstruos que hemos capturado, en busca de nuevas criaturas para engrosar nuestras filas.

En lo jugable, Monster Hunter Stories destaca por su combate y por la captura de sus criaturas. Como comentamos en el avance, sus batallas parecen una chorrada al principio, pero al avanzar por ellas te encontrarás con monstruos que exceden en mucho tu nivel, ¿y cuál es la clave para derrotarlos? Mejorar tus fuerzas y la de los monstruos que te acompañan, claro, pero también conocer la personalidad de la criatura que tienes que derrotar.

Las batallas de Monster Hunter Stories se basan en un sistema de piedra-papel-tijera, solo que aquí se sustituyen por ataques rápidos, técnicos y potentes. Lo divertido es que cada monstruo ataca con una combinación concreta de ellos, por lo que si te anticipas y le respondes con su counter anularás su golpe. Esto acaba abriendo una maravillosa dimensión de juego que nos obligará a apuntar qué ataques realiza cada ser y cuáles no. Monster Hunter Stories se permite así enfrentarte a monstruos capaces de matarte de un golpe si no has estado pendiente de su manera de embestirte.

Lo mismo puede aplicarse a nuestras criaturas, cada una ataca a su manera, y como sus acciones son automáticas a no ser que tengamos la habilidad suficiente para manipularlas, también acaban manifestando su propia personalidad en los combates. Tendremos que saber que monsties elegimos por su colección de golpes y habilidades, subirlos de nivel, mejorarlos y lograr que cada uno tenga la build que queremos tener. No todos los seres que encontramos, aunque sean iguales, tienen los mismos stats.

Para hacernos con nuevos monsties, que así es cómo se llaman los monstruos que se alían con nosotros, tendremos que entrar en sus guaridas, robar sus huevos y llevarlos a incubar. Estas guaridas aparecen espontáneamente en el mapa, si queremos cazar un monstruo en concreto tendremos que hacerle huir a ella para localizarlo y robarle su cría. Esta suma de conceptos sabe entregar novedades a medida que avanzamos en la aventura para hacerse más y más profunda, dándonos exploración, mucho farmeo, buenos combates y una agradable historia que seguir.

Monster Hunter Stories es un videojuego que está mucho mejor parido de lo que puede parecer a simple vista. A las diez horas de juego te darás cuenta de que este no es un título para niños, de que sus batallas son complejas, de que sus retos entrañan dificultad y de que su historia, aunque siempre se mantiene en los estándares de la narración clásica shonen, se deja disfrutar. Súmale a eso que podrás combatir contra amigos tuyos a través de su modo online, que tiene un montón de misiones secundarias y que estas prometen actualizarse a lo largo del tiempo y tendrás ante ti un JRPG notable que no te esperabas querer, pero que quieres.

Sin embargo, Monster Hunter no es perfecto. Tener escenarios tan detallados obliga a que sean limitados y este defecto lo absorbe la narración. Nos tocará realizar muchas tareas que nos forzarán a dar muchas vueltas por la misma sección para completarlas, tanto de la propia trama principal como de las secundarias. Las peleas contra los monstruos, cuando ya los conocemos, tienden a hacerse repetitivas pese a que el juego nos deje acelerar la velocidad de las mismas. También acabaremos machacando mucha veces a los mismos enemigos si queremos conseguir todo lo que el juego nos propone obtener.

Pese a todo esto, Monster Hunter Stories nos ha convencido. Es ese JRPG agradable con el que pasar horas preocupado de que tus compañeros de equipo, aquí monsties, sean perfectos, farmeando y haciendo secundarias para poder derrotar a ese monstruo gigante que te espera al final del nivel. No necesitas esperar a Pokémon Ultrasol para tener en tu 3DS justo eso que estabas buscando, Campcom ha sabido brindarnos un buen equilibrio entre JRPG clásico, recolección de criaturas y exploración en entornos semiabiertos, uno que se disfruta en portátil a las mil maravillas.