1. Mundogamers
  2. Analisis
  3. 3DS

Analisis Monster Hunter Generations ,3DS

Evolución más que revolución
Martes 12 de Julio de 2016 por Bruno Louviers

A pesar de no ser la saga más popular del mundo, cada nueva entrega de la saga Monster Hunter es recibida con alegría y jolgorio por los fans. Puede que en España no sean tantos como en otros países más dedicados o como en el mundo anglosajón, pero hay unas cuantas comunidades muy implicadas con el juego y es innegable que es una saga de calidad que ha sabido pensar en juegos más recientes tanto en los veteranos tanto como para los neófitos.

 

Monster Hunter Generations es una reafirmación de esto, de que tras Monster Hunter 4 Ultimate, la última entrega publicada en occidente, es posible seguir refinando la fórmula y hace que los dos filos, el de la locura de los que llevan jugando desde la PSP y el de la necesidad de conocer y enterarse de los que empezaron hace poco con Wii o Nintendo 3DS; estén igual de afilados y puedan cortar la carne de las increíbles bestias que habitan su mundo.

 

 

Esto es más evidente que nunca por los muchos homenajes a los anteriores juegos que hay en Monster Hunter Generations. Los más obvios son las villas, pues podremos revisitar Kokoto, Pokke y Yukumo una vez más. Esto hará que a más de uno que yo me sé se le salte las lagrimitas, incluso si el autohomenaje impide que el juego avance mucho a nivel narrativo. No es como si hubiera una gran historia en la saga, pero aquí es totalmente inexistente: hay que hacer misiones, subir de rango, ser más fuerte y jugar, jugar, jugar.

 

No es como si esto fuera un problema. En parte, porque volver a ver a ciertos personajes de antaño se agradece, sobre todo porque no hay que dar mil vueltas para hacer una misma acción: todas las villas funcionan más o menos igual y no importas cuál visites, que podrás seguir con tus misiones como si nada. Si no sales de una de ellas no te perderás nada del modo offline de Monster Hunter Generations, vaya. 

 

 

Pero hablemos de lo nuevo y no del pasado, que tampoco es que Monster Hunter Generations viva en él. Una buena muestra de los cambios que introduce está en los estilos de caza y en las técnicas de caza. Lo estilos son 4 y las técnicas, 52. ¿Pero qué significa exactamente? Son aproximaciones nuevas a cómo peleamos contra monstruos y dependen tanto de la categoría de estilo como de las técnicas asignadas a dicho estilo.

 

Suena muy complejo, pero en realidad dos de ellas, el estilo del gremio y el estilo ariete, son similares a como hemos venido jugando en la saga. El primero es clavado a como se peleaba hasta ahora en los juegos y permite usar dos técnicas, mientras que el ariete permite usar hasta tres técnicas y amplía un poquito las posibilidades vistas en juegos anteriores.

 

Los estilos aéreo y sombra son harina de otro costal: el primero está pensado para que ataques desde el aire ne momentos dados, pudiendo montar monstruos o tumbarlos desde arriba si tienes suerte. El segundo introduce parries y esquivas en Monster Hunter, y por eso es el más difícil de usar, así como mi favorito. Ambos estilos pueden tener una sola técnica asignada, por lo que son mucho más especializados.

 

Los estilos dependen mucho de las técncias que usen, pues, pero también del arma que hayas escogido. Por ejemplo, usar el estilo sombra con un hacha espada, que hace que tu combo infinito con la espada sea muy distinto al habitual; no es lo mismo que hacerlo en el estilo aéreo, pues no es tan efectiva en modo espada y te obliga a estar por los aires, lo cual no es siempre fácil ni inteligente, para hacer daño de veredad en el modo hacha. Y así, con cada estilo y tipo de arma. 

 

 

Que no haya una nueva familia de armas queda más o menos suplido por estos cambios que comento más arriba, porque incluso los que llevan más tiempo jugando necesitarán readaptarse un mínimo y entender las nuevas estrategias que pueden permitir los estilos y las técnicas que les asignemos a cada uno. Y lo mejor de todo, que ninguna está realmente por encima del resto: son distintas, son efectivas en el contexto adecuado y pueden divertirte igual, aunque aquí ya entre tu gusto como cazador.

 

Lo que quiero que quede claro es que la variedad que aportan es inmensa. Para mí, es algo que quiero que esté en todos los juegos que sucedan a este y que ha hecho que cambie mi manera de jugar en muchos, muchos sentidos. Ahora, las bestias menores son escollos que esquivo en el modo sombra y que destrozo mediante contraataques. 

 

No olvido, tranquilos, el otro avance de Monster Hunter Generations: por fin es posible jugar como un gato, como un Felyne. Os voy avisando de que se puede jugar a cualquier misión como gato, pero que no es recomendable a menos que formes parte de un equipo de uno o más cazadores amigos. El papel del jugador que es un gato viene a ser de apoyo más que de ataque, pero eso no significa que sea menos importante ni divertido. 

 

 

De hecho, el abanico de posibilidades es tan ampio que hay muchos monstruos que se vencen mejor con esta criatura ayudando que con un cazador más dando candela de forma directa. No poder usar objetos los limita en cierta medida, pero las habilidades que poseen, una vez desarrolladas y bien escogidas, pueden sanar al equipo en un momento clave. Claro que hay que estar muy atento a la barra de energía de la que dependn dichos poderes, pero con un poco de cabeza, es posible jugar y divertirse mucho como gato, tanto en combate como desarrollándolos.

 

Por no alargarme mucho más, también debéis tener en cuenta que la manera en que mejoramos el equipo y las armas ha cambiado un poquito. Seguirá siendo necesario farmear objetos y morirse por conseguir esa pieza de Gypceros Morado que necesitas; pero ahora también se exige un nivel dentro de una categoría del objeto que vas a utilizar. Esto, supuestamente, está pensado para reducir la agotadora búsqueda de objetos y el excesivísimo farmeo: puedes usar una roca muy rara para mejorar tu arma, lo que suma los puntos que necesitas de dicha categoría; o usar dos rocas algo menos raras, que suman también dichos puntos.

 

Sobre el papel, esto acelera un poco la mejora de equipo. En realidad, como siguen haciendo falta elementos tremendamente difíciles de conseguir, en algún momento te va a tocar farmear si realment quieres el mejor arma de entre las mejores armas. Aquí es donde los menos hechos a la saga saldrán repelidos, pero lo cierto es que cuando se haya llegado a este punto del juego, la mayoría de jugadores que huyan cansados del farmeo ya habrán jugado de sobra para estar satisfechos en cierta medida.

 

 

Por último, pero no menos importante: solo hay 71 monstruos en total, sin contar los 34 bichos menores. Monster Hunter 4 Ultimate tenía 75, así que la diferencia no es tampoco muy notable y hay contenido para rato en este área. Es una lástima que solo los cuatro grandes jefes sean algo nuevo de verdad, pero también hay que entender que esta saga no es numérica: no está comprendida como una nuevo paso hacia delante, sino como uno en paralelo. 

 

Ojo, que sí hay 17 nuevas criaturas de gran tamaño y 3 monstruos pequeños, pero siento que en este apartado no han puesto toda su alma y que sus patrones no son todo lo originales que deberían. Me gustan los Maccau, ojo, pero no es algo a lo que me haya costado entender ni vencer, como pasaba en anteriroes entregas. ¿Quizá soy yo, que llevo muchos años jugando? 

 

Sea como fuere, Monster Hunter Generations no se queda corto y sabe rendir muy buen homenaje a los anteriores capítulos, hasta el punto de que cada una de las villas tiene asignada uno de esos cuatro nuevos monstruos en función a lo que se parecen a las criaturas que representaron a Monster Hunter, Monster Hunter 2 y Moster Hunter 3 Ultimate. 

 

 

Así que para cerrar, no puedo decir que Monster Hunter Generations sea un mal juego, porque es impresionante y casi mejor que Monster Hunter 4 Ultimate. Algunos dirán que es algo más fácil que anteriores entregas, porque es cierto que algunos monstruos no pegan con tantas ganas como antaño; pero no puedo decir que esto me parezca del todo mal si nos han dado nuevas técnicas que tenemos que conocer a la hora de combatir. Os aseguro que los bichos más potentes sí tienen una potencia descomunal.

 

Me ha gustado mucho la variedad que introducen los estilos de caza. El modo gatador para controlar al Felyne permite jugar con amigos de una manera distinta. Las armas, aunque sean las mismas, se han beneficiado un montón de los estilos de combate y puedes descubrir, casi sin quererlo, que una combinación de arma que no te gustaba y nuevo estilo se convierte da como resultado tu nueva forma favorita de pelear. 

 

Capcom se ha esforzado en tocar un apartado que quizá necesitaba algo más de variedad, el combate en sí; y ha dejado el resto de apartados tal y como estaban, salvo algunos retoques menores, para no estropear una fórmula que funciona muy bien, que cada vez es más popular en occidente y que a mí no termina de cansarma nunca. Eso sí, estoy un poco harto de jugarlo en portátil, que por mucho que el stick de la New Nintendo 3DS ayude, esto en una PS4 me tendría enganchado 24/7. Monster Hunter 5 multiplataforma, por favor. 

9
/ 10

<< Anterior Siguiente >>