Analisis Gauntlet: Slayer Edition ,PS4

Cuando eres un jugador veterano, o uno con ganas de conocer el pasado, encontrarte un remake de un clásico de la talla de Gauntlet tiene siempre el sabor agridulce de los viejos recuerdos y el temor a la decepción. Gauntlet fue en su momento, 1985, todo un boum en el mundo de las máquinas arcade gracias a su frenética acción para 4 jugadores y la gran cantidad de enemigos en pantallas. Su temática basada en el entonces muy de moda Dungeons and Dragons le valió un primer puesto en los corazones del público de la época, y sin duda fue de los más grandes de Atari, compartiendo lugar en el salón de la fama con títulos como Hang-On, 1942 y los ya muy posteriores Street Fighter 2 y After Burner.

 

Un poco de historia

Sin embargo, para entender la importancia que tuvo en su momento Gauntlet hay que remontarse a tres años antes de su lanzamiento, cuando un joven estudiante del MIT, J. Palevich, publicaba una tesis en la que mezclaba el concepto de las IAs y el desarrollo procedimental casi prehistórico de La Máquina de la Vida de John Horton Conway con el universo de posibilidades infinitas de Dungeons and Dragons, juego al que veía jugar a sus compañeros de habitación cada noche. 

 

 

El resultado, Thesis of Terror, propondría un juego para cinco jugadores en dos computadoras distintas en el que cuatro jugadores harían el papel de PJs en una terminal mientras el quinto haría el papel de máster o director de juego en otra terminal. Tras su licenciatura en el MIT y su entrada en Atari a los pocos meses, Palevich aprovecharía todo lo aprendido de Conway para olvidar el papel del quinto jugador y, al abrigo de la compañía, lanzaría Dandy -título que hace referencia a la pronunciación de las siglas D&D-. 

 

Dandy saldría para Atari 8-bits y vendría con casi todos los elementos que harían famoso al posterior Gauntlet: Un laberinto de varios pisos por conectados por escaleras, generadores de monstruos, puertas y llaves, comida, pociones y monstruos que no aparecen en pantalla hasta que los tienes en tu campo de visión.  Además incluía un editor de niveles para que los jugadores pudieran hacer sus propias aventuras actuando como Dungeon Master, y fue uno de los grandes éxitos el catálogo de la vieja consola. 

 

 

Ahora sí, hablemos de Gauntlet

Dandy funcionó bien, más allá de su lanzamiento en ordenadores de 8-bits a manos de Electric Dreams Software que terminó en querella, y dos años después del éxito de Palevich, Atari contaría con Ed Logg para lanzar una versión mejor, más completa, más alucinante y comercial en sus máquinas arcade coin-op. 

 

En 1985 Gauntlet nacía y visitaba los salones arcades en una potente cabina con un diseño espectacular que invitaba a cuatro jugadores a unir sus fuerzas y visitar los distintos niveles del laberinto para llegar al final a través de sus múltiples escaleras. Como decíamos anteriormente, Gauntlet tomó todo lo bueno de Dandy y le añadió un factor fundamental a su jugabilidad: la posibilidad de elegir entre cuatro jugadores, cada uno con sus puntos fuertes y sus puntos débiles, para enfrentarnos a la aventura. 

 

Así conocimos por primera vez al poderoso guerrero, la acorazada valquiria, el letal mago y el veloz elfo. Los escenarios seguían ahí, mejorando gráficamente lo que habíamos visto en Dandy pero sin aportar mucho más: Vista superior, multitud de enemigos, pociones, tesoros, generadores de mosntruos, puertas y llaves, comida y, sobre todo, esa ambientación de Dragones y Mazmorras que todos aprendimos a amar.

 

 

Hablemos de lo nuevo

WarnerBros. se ha unido a Arrowhead Studios, los culpables detrás del estupendo Magicka, para resucitar al viejo Gauntlet de entre los muertos y, tras lanzarlo en PC hace un año, traerlo ahora de vuelta al escenario de Playstation 4 bajo el nombre de Gauntlet: Slayer Edition.  

 

Lo primero que llama la atención de esta nueva versión del clásico es que nos encontramos con una breve introducción en la que el hechicero Morak invita a nuestros héroes a visitar los laberintos subterraneos de Gauntlet para obtener tres artefactos con los que lograr riquezas, poder y prestigio. Un comienzo flojo digno de Conan el Bárbaro o de los inicios de D&D que, sin embargo, cuaja perfectamente con el espíritu original de este juego, que lo único que nos invitaba era a explorar, y cumplir la parte más activa de AD&D: Avanzar, Destrozar & Destruir. 

 

Historia a un lado y ante la falta de más alusiones a la misma durante la partida, serán los propios personajes que manejamos los que harán evolucionar el argumento mediante comentarios y actuaciones que nos harán recordar grandes momentos de los cómics y el cine ochentero con un guerrero que, como Conan, sólo piensa en el botín, una valkiria que sigue la estela de Red Sonja en busca de venganza o un mago enamorado del poder. 

 

 

Hack'n'Slash

La jugabilidad -y lo que hace años se denominaba 'adicción'- son, sin duda, los puntos fuertes de este regreso de Gauntlet, con un estilo de juego que cambia de un personaje a otro y que se plega muy bien a nuestras preferencias personales. Thor es una masa de músculos a la que le gusta el combate cuerpo a cuerpo, si bien resulta demasiado pesado en sus movimientos; Thyra, la valquiria es el personaje más equilibrado, con la posibilidad de cubrirse con su escudo y ataques de carga y lanzamiento de escudo a lo Capitán América. Merlín y Questor, el mago y el elfo, dependerán más de los ataques a distancia, que se llevan a cabo tirando del stick derecho, mientras con el mago deberemos hacer distintas combinaciones para elegir entre los tres elementos que domina, electricidad, hielo y fuego, una clara referencia a Magicka. 

 

Respecto a la jugabilidad en sí, Gauntlet: Slayer Edition nos invitará a recordar la multiplicidad de niveles del original con un planteamiento diferente en cada nivel, desde enfrentarnos a jefes finales hasta huir de 'la parca', enciontrar la salida del laberinto o matar a todos los enemigos para desbloquear la salida. 

 

Otra referencia al clásico son las monedas claveras. Gauntlet bebe de su fuente para ofrecernos un juego retro en el que las muertes son limitadas, por lo que si gastamos nuestras 'vidas' en un escenario -cuantos años sin decir esto- tendremos que volver a repetirlo. Aquí entran en juego las Monedas Calavera, unos ítems que nos permitirán resucitar y que se obtienen trs rellenar una barra que se completa matando enemigos. Por supuesto podremos recuperar la vida comiendo pollos asados, siempre y cuando no los destruyamos en el fagor del combate. 

 

 

Y qué hay de nuevo

Los chicos de Arrowhead Studios han sabido reflejar todo el encanto clásico de Gauntlet y a la vez han sabido añadirle varias cosas nuevas que hacen de su regreso un título a tener en cuenta. Por un lado, junto a la más que obvia mejora gráfica tenemos la personalidad y los diálogos de los personajes de los que os hablábamos antes. Unos diálogos en los que está presente el sentido del humor de la compañía y que nos harán reír con sus guiños a los clásicos y con su humos absurdo en los mensajes de carga. 

 

Por otro lado tenemos la importancia del oro y del equipo, que podremos gastar y utilizar para cambiar el aspecto de  nuestro personaje y mejorar sus habilidades. A este repecto, Gauntlet se ha renovado respecto a su versión anterior en PC y nos permitirá cambiar de personaje y de dificultad en cualquier momento del juego sin que perdamos el oro acumulado y el quipo obtenido. 

 

Finalmente tenemos dos nuevos modos de juego, Infinito, que nos invitará a recorrer un laberinto infinitop en el que los monstruos se van haciendo cada vez más poderosos; y Coliseo, en el que se plantean diferentes retos diarios y al que se puede jugar en solitario o coperativo online. 

 

Y aquí es donde está la verdadera gracia de éste resurgir de la bestia que es Gauntlet: Slayer Edition, un cooperativo online rápido, sencillo, muy divertido y que cuenta con uno de los mejores matchmaking que he visto hasta el momento en juegos de índole altrnativa. Tiene errores, como la imposibilidad de elegir escenarios o que la desconexión del anfitrión en medo de la partida suponga la pérdida de todo lo obtenido, pero es tan ágil y está tan poblado que tampoco es que esto suponga un gran problema. 

 

 

En resumen

Gauntlet: Slayer Edition es el más que digno regreso de un más que digno heredero. Puede que gráficamente no sea para tirar cohetes y que no ofrezca nada especialmente nuevo al género, pero sí que ha sabido coger un testigo que llevaba años olvidado y recuperar gran parte de la magia de los juegos con vidas limitadas en los que la palabreja adicción tenía una gran importancia. Ahora mismo es uno de los juegos gratuitos de Playstation Plus, así que si tienes ganas de probarlo y una Playstation 4 en casa, te aseguro que echarás unos ratos inolvidables. 

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