1. Mundogamers
  2. Analisis
  3. PS4

Analisis Destiny: Los Señores de Hierro ,PS4

Breve espectáculo antes de volver a lo de siempre.
Martes 27 de Septiembre de 2016 por Víctor Junquera

La trayectoria de Destiny ha sido una increíble sucesión de altibajos en un juego cuya estrategia nunca ha quedado del todo clara, pero del que no cabe duda que, a nivel mecánico, es un producto excelente, digno del nombre de Bungie. Tras un lanzamiento confuso, unos buenos primeros meses, unas 'expansiones' ínfimas y una comunidad fiel pero cansada, llegó el año 2, llegó El Rey de los Poseídos, y con ello llegó el punto álgido de Destiny con el 'ahora sí merece la pena', un gran cambio que justificaba tanto volver como empezar de cero, o seguir con más ilusión aún. Pasan los meses y se vuelve a sentir la fatiga, vuelve a haber cambios a mitad de este segundo año, se vuelve a sentir la ilusión...

 

Bienvenidos a las Tierras Pestíferas, mitad Cosmódromo, mitad zona nueva con alguna actividad nueva. Eso sí, con ni la mitad de profundidad que el Acorazado.

 

Y, cómo no, culpa de las expectativas, Los Señores de Hierro da la impresión de ser una expansión un tanto pobre cuando venimos de la gran cantidad de contenido completamente nuevo con la que llegó El Rey de los Poseídos, y contando con que una actualización gratuita añadía en abril una cantidad de contenido considerable (para ser gratis). Pero claro, esto sería hablando sólo de la campaña, del PvE que tras sólo un par de horas de 'historia', recurre al grindeo y a descubrir misiones secretas de requisitos y objetivos machacones para, poco a poco, ir dando al jugador cosas 'nuevas que hacer'. Y es una pena, porque hay grandes ideas y tanto la primera como la última misión de la campaña principal de esta expansión son espectaculares, pero todo lo demás sabe a poco.

 

Hay muchas formas de afrontar Destiny. Está quien sólo quiere llegar al nivel máximo de luz con su o sus personajes, está quien quiere completar la colección de armas y armaduras, está quien sólo quiere disfrutar del PvP en todas sus variantes, está quien disfruta altruistamente ayudando a que la gente sin clan supere las incursiones,... Hay muchas formas de convertirse en leyenda, de alguna forma, y quizá sólo el primer tipo de jugador de los enumerados pueda ver frustrado el hecho de que todo el esfuerzo en llegar a 335 de luz durante el año 2 (meses y meses jugando a diario) se vea rapidísimamente superado por el nuevo equipo que en cuestión de minutos te coloca en más de 340. Pero aún así, Los Señores de Hierro está bien concebido para que llegar a ese nuevo límite de 385 (próximamente de 400) no sea cuestión de minutos. Hay mucho que hacer para volver a 'ser leyenda'.

 

Y ahora además está el cuaderno de hazañas, una suerte de 'libro de logros' en el que aún hay incógnitas, que nos premia por ir cumpliendo determinados requisitos de Campaña, Patrulla, Incursión o Crisol, y funciona muy bien como forma de organizar todo ese grindeo y esa repetición con un objetivo en mente más allá de farmear engramas o subir el nivel de luz. Una forma eficaz de organizar todas las novedades y de asegurarse de que el jugador siga teniendo algo más que buscar.

 

Los nuevos sets de armaduras son una gozada y hay muchos sitios donde conseguir equipo legendario nuevo.

 

El problema, de nuevo, es que todas esas novedades para hacer son bien escasas, y al centrarse en el nuevo contenido, todo lo anterior vuelve a perder valor a una velocidad trepidante, con una cantidad inmensa de actividades que pierden el sentido al no dar recompensas a la altura del momento. Lo bueno es saber que tarde o temprano Bungie actualizará para ponerlo todo al día, pero aún así, la cantidad y calidad del nuevo contenido de Los Señores de Hierro no es suficiente.

 

Y lo peor es que todo sabe a reciclado, con muchas de las armas exóticas nuevas siendo versiones nuevas de armas del año 1, con una nueva zona cuya mitad es el mismo Cosmódromo de Rusia que ya conocemos de memoria pero con una capa de nieve y SIVA, y este virus SIVA también infecta a un nuevo tipo de enemigos (los simbiontes) que a pesar de parecer nuevos en diseño, son exactamente iguales que los Caídos ya conocidos, iguales en sus diferentes clases (escoria, vándalo, capitán,...), iguales en sus animaciones e iguales en sus comportamientos en batalla, y esto es un motivo más que demuestra lo lejos que está esta expansión de la anterior en cuanto a cantidad y calidad.

 

Los nuevos enemigos son Caídos infectados, con las mismas animaciones, mismos patrones y mismos nombres pero distinto aspecto.

 

Y yendo un poco más allá, lo que más puede llegar a molestar de Destiny: Los Señores de Hierro es, por mucho que desarrolladores y editora quieran excusarlo, no encontrar absolutamente ningún motivo por el que esta expansión de contenido no puede tener lugar en la anterior generación de consolas. Explicar que ya es hora de pasar página y quedarse con eso sería un motivo mucho más convincente que intentar hacernos creer que ahora se pueden hacer muchas más cosas que antes no se hacían y ver que, efectivamente, no hay gran cosa que haya cambiado. Puede haber escenarios con una carga algo mayor de enemigos en pantalla, puede haber nuevas piezas de armadura con mucho más detalle y efectos y puede haber una parte de la nueva incursión en la que cambia la escala y entre acción, efectos, aliados y enemigos puede venir bien algo de potencia extra, pero de nuevo, nada que justifique del todo que muchos fans se tengan que quedar sin las novedades.

 

Pero también hay aciertos, por supuesto. En realidad, en otros juegos ya se justificaría la existencia de una 'expansión' sólo con los seis nuevos mapas y un nuevo modo para el PvP (multijugador competitivo, Player vs Player), pero como conjunto de actividades que es Destiny, hay que tratar todo el contenido por igual. Y esta es la parte en la que sí se podría decir que la ampliación es buena, con una buena serie de nuevos mapas más orientados a las distancias cortas, espacios cerrados e innumerables esquinas que evitan actitudes de 'campero' predominantes en muchos otros mapas, todo esto unido al modo Supremacía (confirmar baja) que también ayuda a esas batallas enzarzadas en las que no hay nada decidido hasta el último punto.

 

Ni la nieve ni los nuevos cosméticos justifican el abandono de la anterior generación.

 

Y por supuesto, Destiny sigue teniendo todo lo que tenía hasta ahora. Es decir, puede que el jugador más fan de Destiny ya haya agotado todas las posibilidades de Los Señores de Hierro en cuestión de una semana y ahora sólo le quede repetir y esperar, o puede que el jugador más ocasional que vuelve de vez en cuando no encuentre los motivos suficientes para volver en esta ocasión, pero para quien se plantée empezar 'desde cero' con el pack completo, este es un momento tan bueno como cualquier otro. Destiny no ha perdido todo el valor que ganó con El Rey de los Poseídos y sigue siendo un FPS excelente a todas luces, pero se nota que el calendario se les ha quedado corto entre la gran expansión y la nueva entrega, y con Los Señores de Hierro va a estar más complicado mantener viva a la comunidad durante tanto tiempo.

7
/ 10

<< Anterior Siguiente >>