Analisis Alien Isolation ,PS4

Es una lástima que no os pueda desmenuzar todas las virtudes de Alien Isolation en un texto que os ayude a deliberar si el trabajo de The Creative Assembly está a la altura de lo que se espera y de toda las expectativas levantadas desde su presentación hace más de un año sin chafaros sorpresas. Lo que sí os puedo decir es que he vivido un lance durante la partida que se ha convertido en la experiencia Alien más emocionante, terrorífica, creíble y poderosa que he vivido a los mandos de un videojuego protagonizado por la criatura creada por el legendario Giger.

Si me hubiesen explicado esa escena de jugabilidad pura, sin scripts y sin trampas, no habría dudado del producto ni un segundo en los meses pasados. Un pulso entre Alien y protagonista inolvidable, uno de esos momentos que se te graban a fuego en la mente y que atesoras dentro de una experiencia jugable que sí, que cumple y que aunque dista de la perfección, creo que puede ser una de las tres mejores experiencias que ha protagonizado el Xenomorfo en su larga y dilatada historia a los mandos de teclados, ratones y mandos.

Desgraciadamente, no puedo contaros mucho más del lance. Creo que os haría un flaco favor si os contase los motivos por los que debéis haceros con él cuando salga a la venta, ya que en el misterio que encierra a todo lo que sucede dentro de la Sevastopol radica el éxito de la producción. Hay clichés que se cumplen, hay otros que no, pero si estás buscando angustia en tu PlayStation 4, PlayStation 3, Xbox One, Xbox 360 o PC, sí, has acertado de lleno con Isolation. Creative Assembly ha logrado un trabajo estupendo en la parte de juego más pura.

Creo que eso no le va a impedir a Alien ser discutido por algunos críticos y jugadores, en muchos casos con razón. No la tendrán si se quejan de que sea una producción difícil, injusta y malsana con la paciencia del jugador, ya que no puede ser de otra manera. Os hablaba hace unos días del trabajo que han hecho los desarrolladores con la criatura y lo que lograron en la presente iteración jugable que, prácticamente, ningún otro desarrollador ha logrado jamás: el Xenomorfo es terrorífico. Un monstruo gigante, peligroso y que si te detecta estás muerto. No tienes derecho a réplica, y así debe ser: un organismo perfecto que mata, mata y mata.

Y no te servirá de nada aprender: puede que le engañes una vez, puede que le engañes dos, pero tu fallo es más probable que el suyo. Y morirás, morirás y morirás. E insisto: así debe ser. Un juego de gato y ratón en el que Creative Assembly no ha cedido un ápice: las armas son una anécdota. No os quiero hablar de vuestro arsenal, de lo que encontraréis y podréis hacer, pero sí os puedo decir que he encontrado, a lo sumo, 30 balas de revolver en una experiencia que a mí me ha durado, prácticamente, 20 horas. Probablemente, el juego con pistolas que menos munición da en años, y es una decisión más que acertada y valiente.

Ni qué decir que las armas al monstruo le dan risa. Puede que, más allá de la historia, uno de los errores más peculiares de la producción sea la duración de la misma. Y es una crítica que tenéis todo el derecho del mundo de no comprender, y más en la era de los videojuegos caros y cortos, pero al título le sobran seis o siete capítulos y unas cuantas escenas de mensajería que son auténtico relleno. Lo único que logra esa duración artificial es que el jugador pierda el respeto a todo el contexto y ambientación que con tan buen gusto y acierto han construido sus desarrolladores.

Sin entrar mucho en ello, hay momentos del que el juego deja de Alien Isolation para convertirse en Ciborg Isolation. Si bien el Alien se comporta de una forma genial, no se puede decir lo mismo de los "civiles" y unos ciborgs que te venden como incompetentes desde el minuto uno de juego. Sin duda, a la producción le sobran humanos, artificiales y no artificiales. Con el bicho sobraba. La Sevastopol, eso sí, es impresionante. Han construido una base espacial espectacular basándose en los elementos tecnológicos del film original. Sí, puede que sea demasiado Nostromo, pero dudo que a algún seguidor pueda importarle el guiño.

Tras finalizarlo, pienso que a Creative Assembly le faltó modestia a la hora de elegir la trama. Continuar la historia de un film legendario como Alien: El octavo pasajero se avecinaba como un reto complicado a todas luces. Y sí, en la historia han fracasado estrepitosamente, sobre todo con el final. La trama sirve de trampolín para llevarte a situaciones que valen los 69 euros del juego, pero con un inicio confuso y un desenlace atroz, me pregunto cuán grave habría sido olvidar a Amanda Ripley y centrar la historia en otro personaje con una madre menos importante.

Y no es que Amanda sea una mala protagonista, es que, sencillamente, nunca llegas a pensar que realmente busque a su madre y tampoco se ofrece un motivo suficientemente convincente para subir a la Torrens. El peso de llamarse Ripley, para cualquier seguidor de la serie está ahí, y someter a ese peso una producción tan humilde (pero más que satisfactoria) como la presente les viene muy grande. De hecho, aunque tienen el beneplácito de 20th Century Fox, nunca llegaron a consultar nada con Ridley Scott. Una lástima.

Se ha hecho un gran trabajo en el sonido, con un uso de la música de matrícula y un trabajo de interpretación en castellano estupendo. Algunos errores gráficos acaban empañando un apartado en el que la luz es la más absoluta protagonista. Un trato lumínico magnífico en nueva generación que seguramente en PC será de matrícula. Asegúrate de jugar bien al juego: con el volumen moderadamente alto y ajustando la claridad de tu televisor a la adecuada para no enturbiar la experiencia. Si consigues meterte dentro y aceptar tus errores, estarás encantado con lo que vas a disfrutar.

Ha fallado en contarnos una buena historia y, por extraño que parezca, se ha pasado ofreciendo horas de juego, pero ha hecho con nosotros lo que ha querido. Es una de las experiencias Alien más vibrantes que he vivido a los mandos de una consola. No le libra algunos errores y algunos elementos en los que se podría haber sacado partido, pero si le sumas todo lo que no te puedo contar y que vas a disfrutar, si te gusta Alien y vas avisado de sus defectos, no dudes en hacerte con él. Una más que grata sorpresa y una lección de The Creative Assembly, que a pesar de las dudas no se ha arrugado en un desarrollo en el que tenía mucho que perder.